Muchas personas deciden hacer de sus cuerpos un lienzo, por moda, para recordar una fecha especial, mientras que otros lo hacen para cubrir algunas cicatrices que de alguna manera u otra las han dejado marcadas por alguna enfermedad.
Octubre ha sido denominado como el mes rosa, en conmemoración por la lucha contra el cáncer de mama y por esta razón DesdeLaPlaza.com conversó con Thaide Morales y Gustavo Betancour, dos artistas que con sus manos y un poco de color le dan vida a esas cicatrices que con orgullo gritan “Tuve cáncer, vencí y ahora veo la vida de mil colores”.
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La tinta y una aguja convierten en obras de arte aquellas marcas que dejó la terrible enfermedad.
La tatuadora Thaide Morales de Allegra Tattoo comenta que ha realizado 5 tatuajes a 5 guerreras en la zona del pecho para cubrir la cicatriz y explica que una de las figuras más buscadas por las féminas son las rosas y arreglos florales con muchos colores.
“Las chicas que me contactan buscan hacerse algo sutil y delicado que cubra la marca, ya que de por sí esta es una zona muy delicada, normalmente suelen acompañar el diseño con alguna frase”.
Comenta que además de cubrir la cicatriz, muchas chicas optan por realizar tatuajes conmemorativos en otras zonas del cuerpo, “se hacen la cinta rosa y le agregan otro tipo de escrito significativo, una fecha, un lugar”.
Para Thaide el simple hecho de ser elegida por estas chicas para poner un poco de color en una cicatriz, que en algún momento representó una batalla, en la que cada mujer se aferraba a la vida día a día significa un orgullo y lo describe como una sensación increíble.
“Se siente increíble, es hermoso poder contribuir con esa superación de la persona y al terminar puedes ver lo que siente. Su cara de alegría te lo dice todo, sus lágrimas te transmiten un sentimiento tan gratificante”.
Las redes sociales las acercaron a mí
La artista de la aguja comenta que las redes sociales le dieron a sus clientas la oportunidad de localizarlas y eso es algo de lo que esta agradecida.
“No había tenido la oportunidad de conocer a alguien que hubiera pasado por esto y ellas llegaron a mí. Me contactaron vía Instagram y Facebook y me contaron por lo que habían pasado y lo que querían hacerse”.
Recuerda que una vez tatuó a la primera chica, esta trajo a otras amigas que pasaron por la misma situación.
“Llegaron muy seguidas, cuando tatué a la primera chica ella trajo a otras conocidas que al igual que ella habían ganado la batalla al cáncer”.
Explica que ahora estas mujeres llevan en sus cuerpos unos diseños únicos que las acompañarán toda la vida.
Los familiares también celebran la vida
Recuerda que ante esta celebración por la vida, muchos familiares acompañan a las sobrevivientes a realizarse el tatuaje y conmovidos deciden agregar un poco de tinta a su cuerpo también.
“Hace algún tiempo cubrí la cicatriz de una chica y con ella vinieron dos familiares que se realizaron un tatuaje conmemorativo en honor a ella y al proceso que pasó y superó”.
Finalmente, reconoce que en momentos en los que se siente frustrada recuerda a las chicas y eso la ayuda a inspirarse y seguir adelante.
“Muchas veces me frustro, ya sea porque no me salen bien los diseños o por cualquier otra cosa y no me siento conforme con algo, pienso en ellas, recuerdo lo que pasaron y de algún modo me siento tonta porque me preocupo por cosas banales”.
Una manera de sentirse bien con ellas mismas
Aunque Gustavo Betancour de Soul Tattoo solo ha tenido la oportunidad de reconstruir un pezón a base de tinta, asegura que ni siquiera sabía que esa área tan sensible del cuerpo podía ser tatuada.
“No sabía que se podía tatuar, me llegó una cliente y me habló de Vinnie Myers, un artista de Baltimore que se dedica a reconstruir aureolas y me di cuenta de que en efecto si es posible tatuar esa área, algo que me pareció espectacular”.
Reconoce que se sintió bien cuando vio la reacción de la chica, “Ella lloró, me abrazó y eso es gratificante. La alegré por el simple hecho de haber hecho el trabajo bien».
Explica que para lograr una apariencia más natural la chica a la que tatuó se someterá a una intervención quirúrgica en la que “el medico reconstruirá lo que es el pezón como tal en base al maquillaje que realicé”.
El primero de muchos
El artista dice que este tatuaje fue el primero de muchos, ya que desde que lo realizó algunas clientes se han acercado al local ubicado en el Centro Comercial City Market de Sabana Grande a preguntar por diseños similares.
“Como ella todavía está en consulta le habla a sus amigas de mí y varias chicas se han acercado a preguntar, pero como la operación es reciente todavía no puedo tocarlas porque deben esperar un tiempo prudencial para la cicatrización. Si se hace al momento la tinta no se adhiere a la piel”.
Son muchos los tatuajes que Betancour con 18 años de experiencia ha realizado, pero reconoce que estas chicas en especial se rayan porque es algo que realmente necesitan.
“Tiene que ver con la comodidad, las mujeres están acostumbrada a sus pechos, a su forma y que de un momento a otro te lo quiten, es algo muy rudo y después de todo lo que han pasado necesitan sentirse bien con ellas mismas”.
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