Cambios en las políticas energéticas y de transporte podrían salvar anualmente la vida de millones de personas que mueren por enfermedades causadas por los altos niveles de contaminación del aire, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
«La evidencia es abrumadora, el cambio climático pone en peligro la salud humana. Existen soluciones y tenemos que actuar con decisión para cambiar esta trayectoria», declaró ayer la directora de la OMS, la doctora Margaret Chan.
De acuerdo con la agencia sanitaria de la ONU, si se introducen cambios adecuados en las políticas energéticas y de transporte se podrían reducir los costes sanitarios asociados con la inactividad física y las lesiones de tráfico.
Los países deben de tomar medidas para adaptarse al cambio climático que permitan a su población enfrentarse mejor con el impacto que tiene el calor en la salud, los episodios climáticos extremos, las enfermedades infecciosas y la inseguridad alimentaria, señaló la OMS.
Estos temas medioambientales serán discutidos a partir de hoy en la primera conferencia mundial sobre la salud y el clima que acaba de inaugurarse en la sede de la organización en Ginebra y que reunirá a más de trescientos participantes que incluyen a ministros de salud y representantes de la sociedad civil.
Desde la Plaza/ABC/AMH