Todo lo que nos rodea está lleno de mitos. Que si comes parado no te llenas, si comes pura piña adelgazas, si te duele el cuerpo después del ejercicio es porqué lo hiciste bien y la clásica, entre más sudas más grasa quemas, y un sinfín de argumentos falsos.
Por eso hoy, para que no caigan en cuentos de abuelitos, te presentamos una lista con los 8 mitos falsos más comunes.
8 mitos falsos
- Sudar adelgaza: Efectivamente, cuando sudas, pierdes peso, pero lo recuperas inmediatamente, al reponer los líquidos que es imprescindible para la salud y rendimiento, es decir no pierdes ni un gramo. Lo que haces es forzar la sudoración, afectar el correcto estado de hidratación, poniendo en jaque tu salud
- Más proteínas más fuerte: Señores, no caigan en las falsas esperanza de los suplementos de proteínas que prometen aumentar la masa muscular, porque no es así. Aunque las proteínas posibilitan el correcto anabolismo de los aminoácidos, por sí solas no aumentan la masa muscular.
- No bebas agua durante el ejercicio para evitar el flato (punzadas, dolor abdominal): El comienzo de este dolor es impredecible y su naturaleza aún es imposible de explicar con certeza. Pero lo que está claro es que no es una buena idea dejar de consumir líquido durante el ejercicio porque no está demostrado de ningún modo que se prevenga el flato y lo que es seguro es que el agua es imprescindible para el correcto equilibrio y funcionamiento de nuestro cuerpo, más aún durante la actividad física.
- Cuando dejas de entrenar el músculo se convierte en grasa: Grasa y músculo son dos tejidos diferentes que no pueden bajo ningún concepto transmutarse el uno en el otro. Es frecuente que deportistas que dejan de entrenar pierdan masa muscular y ganen grasa. Pero en ningún caso se puede transformar el músculo en grasa o viceversa.
- Los deportistas tienen que tomar suplementos vitamínicos: Es un error. Una dieta variada, rica en frutas, verduras y hortalizas, aportan suficiente cantidad de vitaminas. Claro está, algunos deportistas pueden tener deficiencias por desgaste de esfuerzo físico, y necesita complementar sus vitaminas, pero debe ser bajo supervisión médica.
- Cuanto más entrenas, más avanzas: ¿Haces tú rutina de siempre pero ya no avanzas? Esto se debe a que el cuerpo se acostumbra pronto a los tipos de estímulo y tienes que cambiar para que mejore. El caso es no seguir invirtiendo tiempo y esfuerzo en un camino que ya no te da los mismos frutos.
- Dúchate con agua fría o caliente inmediatamente después de entrenar: Es recomendable relajarte antes de bañarte. Una vez en la ducha, usa agua templada y aplica el chorro sobre cuello, muñecas e ingle, pues así ayudarás al cuerpo a disminuir el calor residual.
- Llego a la meta y me tumbo a descansar: Lo mejor tras una actividad aeróbica es disminuir la velocidad progresivamente, para que cuando el mecanismo de bomba músculo-esquelético se pare definitivamente los otros mecanismos de retorno venoso puedan asumir el trabajo sin complicaciones.
Desde La Plaza/ runnersvenezuela/SE