Según el Ministerio de Sanidad de Madrid, España, el sexo a la tercera edad puede tener grandes beneficios, tales como una mejor calidad de vida, mejoramiento en la salud, reducción del estrés, mayor autoestima, mayor facilidad para realizar actividades rutinarias.
No obstante, existe cierto tabú respecto a que los ancianos, debido a ciertas complicaciones médicas, no sólo no pueden sino no deben tener sexo, pero también se ha comprobado que las complicaciones médicas como artritis, dolores crónicos, diabetes, afectaciones cardiovasculares, incontinencia o los accidentes cerebrovasculares pueden dejar de ser un obstáculo si se atienden con un tratamiento médico.
El Centro de Salud y Envejecimiento de Australia Occidental realizó una encuesta entre 3 mil hombres de entre 75 y 95 años, consiguiendo cifras sorprendentes, ya que de acuerdo con los resultados, el 50 por ciento de los ancianos deseaba seguir teniendo encuentros sexuales, aunque un tercio de los encuestados reveló que no tenían relaciones sexuales desde hacía un año, y de estos, el 43 por ciento deseaba que su actividad fuese mayor.
Una quinta parte de los encuestados reveló que para ellos era muy importante seguir teniendo relaciones sexuales a su edad.
Los factores sociales y médicos que los investigadores consideraron para que escaseen las relaciones sexuales entre personas de la tercera edad fueron: la edad, niveles bajos de testosterona, limitaciones físicas, falta de interés de la pareja, osteoporosis, cáncer de próstata, diabetes, fármacos para la depresión, y algunos medicamentos para la presión arterial.
Desde La Plaza/ABC/NCH