Desde agosto de 2014, más de 100 personas entre niños y jóvenes han sufrido una extraña parálisis en EE UU, según las autoridades sanitarias. El extraño caso ha llegado a revistas como The Lancet y Nature,que lo atribuyen a un enterovirus, el EV-D68. Este patógeno está emparentado con el de la polio, pero también con el del resfriado.
Pero la atribución de los síntomas no está todavía cerrada. En el estudio de The Lancet se han analizado muestras de 12 niños y se ha encontrado el enterovirus en cinco de ellos. De hecho, Nature cita a John Watson, epidemiólogo del centro de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Atlanta, que afirma que la prueba vendrá si se detecta el enterovirus en el fluido espinal o cerebral de los afectados. Hasta ahora se ha detectado pero en muestras nasales, por ejemplo, algo bastante lógico ya que el enterovirus se parece mucho al rinovirus y causa, sobre todo, infecciones respiratorias.
De momento, la relación más fuerte está en la secuencia temporal: las personas se infectan y después desarrollan la parálisis. Ha habido algún caso en Francia, pero no se han descrito otros sospechosos en ningún otro lugar.
Desde la Plaza/El País/AMH