La fulgurante moda de estos dispositivos, que vaporizan un líquido con nicotina mediante una fuente de calor, está multiplicando los estudios sobre los efectos y peligros de vapear.
Un nuevo estudio publicado por la revista Pediatrics, encontraron evidencias de que los cigarrillos electrónicos exponen a los usuarios a niveles significativos de sustancias químicas peligrosas presentes también en la fabricación de productos como espuma de poliestireno o ácidos.
Los científicos de la Universidad de California en San Francisco analizaron la orina de casi 100 adolescentes de los cuales unos solo vapeaban, otros vapeaban y fumaban y un tercer grupos no consumía cigarrillos de ningún tipo.
La investigación encontró evidencia de metales tóxicos como el plomo en el vapor de casi 70 cigarrillos electrónicos aleatoriamente muestreados. Los científicos descubrieron que estas toxinas estaban presente en las muestras de orina de adolescentes que usaron productos sin nicotina, lo que sugiere que los problemas del proceso de calentamiento inherente a cualquier residuo generado por el vapeo.
«Los adolescentes deben ser advertidos de que el vapor producido por los cigarrillos electrónicos no es un vapor de agua inofensivo, sino que contiene algunos de los mismos productos químicos tóxicos encontrados en el humo de los cigarrillos tradicionales», dijo Mark Rubinstein, profesor de pediatría de la Universidad de California en San Francisco y autor principal del estudio.
Según el estudio, hay evidencias de la presencia de otro conjunto de sustancias químicas potencialmente tóxicas que incluyen acrilonitrilo, acroleína, óxido de propileno, acrilamida y crotonaldehído, algunas que también se encuentran en los cigarrillos convencionales. La mayoría de estos compuestos se utilizan en el proceso de fabricación de ácidos y fibras, según la Agencia de Protección Ambiental, y no se han estudiado las consecuencias sobre la salud de quienes los consumen de esta manera.
Muchos de estos químicos causan dolores de cabeza, mareos, náuseas, irritación del tracto respiratorio superior y congestión. Además al menos dos de ellos son causantes de tumores en roedores, lo que ha llevado a los investigadores a clasificarlos como «probables cancerígenos humanos».
Por otra parte, Ana Rule, profesora de salud ambiental e ingeniería en la Universidad Johns Hopkins y autora de un estudio relacionado sobre cigarros electrónicos y adolescentes, demostró que el vapor de estos dispositivos incluía sustancias tóxicas como plomo, níquel, cromo y manganeso, a menudo en concentraciones que se aproximaban, cumplían o excedían los límites definidos como seguros por la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos.
Peligros de vapear
Recientemente la agencia de salud de Wisconsin informó de ocho casos de adolescentes con una extraña enfermedad pulmonar relacionada con el vapeo. Todos los pacientes han sido diagnosticados con daño pulmonar grave y presentan síntomas como dificultad para respirar, fatiga, dolor en el pecho y pérdida de peso.
Por esta razón, a continuación te mencionamos los peligros de vapear:
– La nicotina estimula el sistema nervioso central. Las dosis más altas de nicotina aumentan la presión arterial, la respiración y la frecuencia cardíaca, lo que puede provocar una frecuencia cardíaca anormal (arritmia). En casos poco frecuentes, puede causar insuficiencia cardíaca o la muerte. Con el tiempo se puede desarrollar problemas médicos que incluyen enfermedades cardíacas, coágulos de sangre y úlceras estomacales.
– La nicotina aumenta el nivel de dopamina en el cerebro. Afecta la parte del cerebro que controla la sensación de placer, motivando a consumir nicotina una y otra vez. Eso es lo que hace que la nicotina sea adictiva.
– Los ingredientes en el líquido no están etiquetados. Esto significa que no sabemos con seguridad qué hay en el líquido.
– Hay sustancias químicas en el líquido. Se sabe que algunas de estas causan cáncer. Un estudio encontró un químico tóxico que se encuentra en los anticongelantes.
– El elemento térmico elimina partículas diminutas que pueden ser nocivas. Estas partículas pueden causar inflamación en los pulmones, lo que puede provocar infecciones bacterianas o neumonía.
– El líquido en el cartucho puede ser venenoso si alguien lo toca, huele o bebe. Existe un aumento de casos de envenenamiento en niños menores de 5 años que han tenido acceso al líquido.
– El «tabaquismo pasivo» sigue siendo un problema con los vaper. El vapor contiene sustancias químicas que perjudican los pulmones y corazones de las personas que no están vapeando.
– Sirven como producto de introducción para preadolescentes y adolescentes. Muchos niños comienzan con el vapeo y luego pasan a otros productos de tabaco.
DesdeLaPlaza.com/ Agencias/ KM