Drake Baer, un especialista en psicología organizacional, liderazgo y estrategia, publicó la lista en el sitio web de noticias Business Insider. Según el autor, cuando las personas buscan incorporar nuevos conocimientos es necesario contar con la información que se busca adquirir y saber cómo funciona el proceso de aprendizaje.
Baer postula cuatro estrategias que permiten «recordar todo lo que aprendemos»:
1. Esforzarse por recordar: Cuando las personas hacen esfuerzos «al límite», alcanzando su máxima capacidad, es cuando se obtienen mejores resultados. Bajo esta premisa, el autor indica que las personas deben tratar de esforzarse por recordar aquello que aprendieron utilizando, por ejemplo, «tarjetas» con la información adquirida.
2. No caer en la «fluidez»: «De fácil lectura» es un término que describe la sensación de fluidez. Esta sensación es popularmente conocida y, según Baer, cuando se comienza a sentir que las letras se absorben con facilidad empiezan los problemas. Una forma práctica de evitar esta percepción engañosa es preguntarse a sí mismo los contenidos que se acaba de incorporar, asegurándose de que los mismos se han fijado correctamente en la memoria.
3. Conectar lo nuevo con lo viejo: Los autores del libro ‘Make It Stick’, el cual estudia las relaciones entre las distintas estrategias que sigue el proceso de aprendizaje, confirman que entre más conexiones se encuentren entre los conocimientos previos con los de adquisición reciente, más fuerte será su fijación. «La clave reside en encontrar relaciones con la vida cotidiana«, escribió Baer.
4. Reflexionar es una buena costumbre: En un estudio realizado por la Escuela de Negocios de Harvard se comprobó que las personas que reflexionan sobre sus comportamientos muestran mejoras significativas en su eficacia. «Ponen más esfuerzo en lo que hacen y, por ende, en lo que aprenden» aseguró Francesca Gino, profesora de la universidad.
DesdeLaPlaza.com/ Tele5/AMH