Cinco enfermedades que pueden transmitir los mosquitos

No existe un lugar en todo el mundo en que se pueda huir de la picadura de un mosquito… Ni de las enfermedades que transmiten.

Aunque quisiéramos exterminarlos no podemos, ya que desaparecer de la faz de la Tierra a los mosquitos podría tener efectos desastrosos en el ecosistema: sus larvas procesan los residuos en el agua donde se crían y los adultos tienen un importante papel en la polinización.

También son una nutritiva fuente de alimento para criaturas como el pez mosquito, que se engulle hasta cien larvas al día.

Y a pesar de que la malaria es quizás la enfermedad más conocida en el mundo, hay otras afecciones desagradables que se propagan gracias a estos insectos.

Aquí ofrecemos una lista de cinco de esas otras enfermedades que una persona puede contraer con tan solo una picada.

Fiebre amarilla

El virus de la fiebre amarilla infecta a unas 200.000 personas al año.

En 1881, el doctor y científico cubano Carlos Finlay fue el primero en sospechar que la enfermedad se transmitía por la picadura de un mosquito. Pero no fue sino 20 años más tarde que su teoría se confirmó.

El control de la población de mosquitos ayudó a la reanudación de las obras del Canal de Panamá, donde hasta entonces uno de cada diez hombres había muerto de fiebre amarilla.

Una vez que la persona se infecta, la fiebre aparece unos días después.

Después de una aparente recuperación, cerca del 15% de los pacientes entran en una segunda fase tóxica que tiene una tasa de mortalidad del 50%. Aquí es cuando surge la característica coloración amarilla en la piel y en la parte blanca de los ojos debido a que causa daños en el hígado.

Afortunadamente, existe una vacuna que se recomienda a cualquiera que viaje a zonas donde la fiebre amarilla es endémica.

Dengue

La mitad de la población del mundo está en peligro de contraer dengue, que causa fiebre, fuerte dolor de cabeza, dolor en la parte de atrás de los ojos, en las articulaciones y los músculos, y erupción en la piel.

No hay vacuna o medicamento específico para tratar el dengue. El tratamiento de apoyo incluye reposo, mucho líquido y medicinas paliativas.

El dengue hemorrágico, una forma aguda de la enfermedad, puede ser letal.

Al contrario del mosquito Anopheles, portador de la malaria y que pica en la noche, el Aedes aegypti está activo durante el día.

Las plaquetas son necesarias para ayudar a la coagulación de la sangre. El dengue evita que la médula ósea las produzca, por lo que la hemorragia es una complicación grave del dengue.

Chikungunya

La fumigación es una de las formas de controlar la enfermedad.

Puede que suene como algún lugar interesante, pero chikungunya es una enfermedad desagradable que causa fiebre alta y dolor en las articulaciones.

«Es debilitante. (Las personas que la sufren) no pueden trabajar y tienen que quedarse en cama con dolor en las articulaciones«, señala el profesor Johan Giusecke, científico jefe del Centro Europeo para el Control de Enfermedades en Suecia.

«La mayoría de las personas experimentan fiebre alta por poco tiempo, se sienten realmente enfermas y tras una semana aproximadamente se les pasa», explica Giusecke.

«Pero han existido casos de chikungunya en que el dolor de las articulaciones dura semanas o en que, como consecuencia de la infección, la persona queda con artritis crónica«, agrega. «Si bien no suele ser fatal, esta enfermedad puede contribuir en la muerte de personas frágiles o de mayor edad».

En noviembre pasado se supo del primer caso de chikungunya en América. Surgió en la isla caribeña de San Martin, la infección hasta ahora ha sido responsable de cuatro muertes.

Según la Organización Mundial de la Salud, desde 2005 ha habido 1,9 millones de casos en India, Indonesia, Tailandia, las Maldivas y Birmania.

Actualmente, no hay cura o vacuna, por lo que expertos aconsejan que la mejor manera de enfrentarla es evitando picaduras. La buena noticia -si se puede considerar como tal- es que una vez que la persona se infecta se vuelve inmune.

Encefalitis de La Crosse

El virus ARN Bunyaviridae es responsable de la encefalitis La Crosse.

Este virus lleva el nombre de la ciudad de La Crosse, en Wisconsin, Estados Unidos, donde fue descubierto en 1963.

Si bien es bastante rara –sólo afecta de 80 a 100 personas al año en EE.UU., la mayoría niños-, aquellos que contraen esta enfermedad pueden tener fiebre, dolor de cabeza, náusea, vómito, fatiga y letargo.

Los casos más severos pueden producir ataques, coma y parálisis.

Este virus se mueve entre mosquitos y pequeños animales como ardillas, pero los humanos no se pueden contagiar de estos últimos.

Filariasis

La primera vez que se describió fue hace 2.500 años, por doctores hindúes y persas. El gusano parasitario Wuchereria bancrofti también se propaga por los mosquitos.

En casos extremos puede ocasionar elefantiasis.

Para que las larvas se desarrollen en un gusanos adultos se necesita de hasta un año. Una vez que entran en el sistema linfático humano, la piel y los tejidos subyacentes se espesan, especialmente en las piernas, brazos, pechos y genitales. Es una enfermedad que desfigura y estigmatiza.

La primera vez que se habló de la transmisión de esta enfermedad por un mosquito vector fue en 1877, por Patrick Manson.

El tratamiento temprano puede ser muy efectivo, pero los fármacos que se utilizan no tienen efecto en los gusanos adultos.

DesdeLaPlaza.com/BBC Mundo/COM