El erotismo y la sexualidad son tan importante en una relación de pareja como los sentimientos y valores. Pero, los pensamientos durante el sexo pueden determinar el estado en que se encuentra tu relación.
Entonces, ¿en qué piensas cada vez que tienes sexo con tu pareja? Aquí te dejamos 7 pensamientos que puedes tener en ese momento:
“¿Qué hora será? Tengo cosas que hacer”
En vez de encontrarte envuelta en el placer y en camino para llegar al orgasmo, tu cerebro responde de la misma forma que cuando estás aburrida y aprovecha para planificar la agenda del día siguiente mientras él termina. Este es el pensamiento intrusivo sobre lo que harás en el futuro inmediato.
“¿De verdad me dijo eso?”
El dirty talk no sólo se trata de decir lo más sucio que se te ocurra para excitar a tu pareja. La imaginación y el nivel de erotismo durante el sexo a través de frases explícitas requiere de susurrar las palabras precisas en el momento exacto y sobre todo, de confianza. Si te sientes incómoda con alguna exclamación de tu pareja, debes expresarlo y dejar claro qué deseas y prefieres evitar en cada encuentro.
“Espero no me toque la cintura”
Conforme aumenta la temperatura, las sensaciones y el contacto entre ambos es lo que más importa, pero si te preocupa tu figura, lo que tu pareja opine sobre tu cuerpo o tu peso, es momento de dejar a un lado las inseguridades. Lo último que piensa sobre ti en ese instante es en tus defectos.
“Está bien, pero no se mueve tan rico como…”
Si la química y tensión sexual entre ambos se materializa en encuentros salvajes y llenos de pasión, nunca te preocuparás por hacer comparaciones indeseadas, pero en caso de que aún no encuentran cómo complacerse el uno al otro, puede que vengan a tu mente experiencias pasadas, una señal de que hace falta comunicación para mejorar en el plano sexual.
“No era lo que esperaba”
Conoces a alguien y no dejas de admirar su físico. Te imaginas cuán excitante sería tenerlo entre tus piernas y cuando por fin llega el instante, te quedas con ganas de más. En el sexo como en la vida, es fundamental diferenciar la apariencia de la esencia para no caer en decepciones.
“¿Te falta mucho para acabar?”
Este es un pensamiento recurrente provocado por la falsa creencia de que para ser fabuloso el encuentro sexual debe durar toda la noche. No hay nada mejor que una duración media que esté llena de intensidad, en lugar de llevar un ritmo casi mecánico durante horas.
“Con esto se acabaron las peleas”
Hacer del sexo el principal sostén de tu relación es una apuesta directa a la dependencia. En ocasiones, algunos pequeñas peleas sin sentido pueden resolverse en la cama, pero de ahí a convertir el acto sexual en un salvavidas que se encargue de sacar a flote una y otra vez tu relación no es para nada bueno.
¿Has tenido alguno de estos pensamientos durante el sexo alguna vez? ¡Comenta!
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