Una iniciativa llamada Bios Incube, la urna inteligente, permite utilizar las cenizas de una persona como nutriente para dar vida a un árbol.
Este sistema está compuesto por una vasija de material biodegradable con sensores y un sistema de irrigación (riego de un terreno) integrado donde nace y crece un árbol en contacto con los restos incinerados, según indica la empresa.
Además la urna tecnológica permite monitorearla para que la planta se desarrolle de forma óptima y controlada.
Este dispositivo se conecta mediante wifi a una app que informa como va creciendo el árbol, ofrece consejos para mantenerlo y, además, alerta sobre las condiciones del clima para su óptimo cuidado.
Sus creadores aconsejan plantar especies nativas de árboles para que se desarrollen de acuerdo a las condiciones ambientales y si el usuario lo desea, la urna puede alojar un árbol durante varios años.
Aquí el video del proceso:
Convertir cementerios en bosques
La urna tecnológica, además de ser una solución innovadora, beneficia al planeta porque ahora hay menos espacios disponibles para enterrar a los muertos.
Roger Moliné, uno de los cerebros de esta iniciativa, explicó a EFE que la idea es devolver el cuerpo a la tierra y un retornarlo a la vida a través de la naturaleza.
«De algún modo se reintroduce al ser humano en el ciclo natural de la vida y se extiende este proceso permitiendo que la gente aprenda de uno de los momentos más importantes de la existencia, en vez de visitar un cementerio una vez al año».
DesdeLaPlaza.com/VeoVerde/KM