Ian y Karen Gilbert, una pareja de Pontypool, al sur de Gales, tuvieron hace unos meses trillizas prematuras. El problema con el que se han encontrado es que no saben quién es quién. Un día decidieron pintarles los dedos gordos de los pies a cada una de un color. Y el truco ha funcionado y ya no tienen ningún tipo de problema.
El tener trillizos puede llegar a ser un problema para saber a quién se ha dado de comer o se ha lavado. Esto le ha pasado a Ian y Karen Gilbert que hace unos meses tuvieron trillizas y se les hacía imposible durante el día a día saber a quién de las tres habían dado de comer.
Cada una lleva un color que empieza también con la misma letra que el nombre del bebé. Su madre, Karen, afirma que «no es por estética, sino para poder distinguirlas». «Nos ha facilitado mucho nuestra vida», asegura al diario Mirror.
Además, las pequeñas ya han aparecido en la televisión, en dos series americanas en la que hacían de un único bebé ya que son completamente iguales. La hermana mayor de estas trillizas tiene cuatro años y es quien le pinta las uñas a sus hermanas.
Desde la Plaza/Mirror/AMH