Científicos han descubierto la manera de detectar dónde se encuentran exactamente las venas de los pacientes gracias a un dispositivo que funciona con luz infrarroja.
Las personas con acceso venoso difícil suelen tener problemas a la hora de ser sometidos a una punción, ya sea para un análisis, una extracción de sangre o un tratamiento intravenoso. Es por eso que este aparato quiere facilitar el procedimento.
Su funcionamiento es sencillo: la sangre contiene una gran cantidad de hemoglobina que absorbe la luz infrarroja, de tal modo que cuando se proyecta esta luz por encima de la piel, las venas se diferencian notablemente respecto a los otros tejidos.
Con este aparato el personal médico puede localizar las venas más difíciles de detectar y a su vez los pacientes se ahorran los pinchazos inecesarios y las molestias adicionales, reduciendo así el estrés para ambos.
Aunque esta tecnología se está utilizando en hospitales y clínicas de todo el mundo, la Cruz Roja de Australia es la primera organización que hace uso del dispositivo para sus servicios de banco de sangre. Así, esperan facilitar la tarea de donar sangre y atraer a futuros donantes.
[youtube http://www.youtube.com/watch?v=OlsohMj_IVA&w=560&h=315]Desde la Plaza/La Vanguardia/AMH