Desde siempre nos han remarcado con lápiz rojo eso de ‘debes ser organizado’, porque de esta manera tendrás el éxito asegurado.
Ya sea en el hogar, la escuela o la vida diaria, la organización se nos ha inculcado desde que nacemos. Por otro lado, el desorden ha sido tomado como un síntoma de fracaso. ¿Qué sucede en realidad? ¿Existen personas que hayan desarrollado la creatividad a partir del desorden?
La Universidad de Minnesota realizó un estudio que consistía en hacer una serie de experimentos con el comparativo de personas en una habitación ordenada y una desordenada.
Lo que los llevo a obtener esta respuesta: El pensamiento creativo, se trata de pensar fuera de las lineas del razonamiento, es decir, lejos de lo “convencional”.
Consideraron que al poner las cosas fuera del lugar al que estamos acostumbrados se generaría la creatividad.
El concepto también puede ser aplicado para cuestiones que sean más abstractas:
Obviamente el escritorio de Albert Einstein, era como una novia despechada que tenia la misión de destruir su área de trabajo (misión que fue un gran éxito). Sin embargo no se puede negar la creatividad de este gran genio.
Einstein no estaba solo en estos asuntos de los escritorios desordenados. Mark Twain, también contaba con uno, quizá más desordenado que el de Einstein, y aún así era una de las mentes más creativas y originales de su generación.
Si estos dos personajes no captan tu atención, te dejo como ejemplo a Steve Jobs. No es extraño que el fuera el inventor de las iBooks si escritorio era un completo desastre, supongo que esto fue lo que más le ayudo a que fuera tan brillante.
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