Seguramente, en diversas ocasiones te has tropezado en el muro de tu Facebook con retos mentales que te roban unos minutos en un intento de resolverlos, a pesar de que te advierten que solo un pequeño porcentaje logra descifrarlos correctamente.
Otros, principalmente las ilusiones ópticas, te mantienen embobado mirando fijamente al monitor y preguntándote ¿cómo puede ser posible?
Aquí en Desde La Plaza, nos tomamos el atrevimiento de hallar las soluciones a algunos retos y la explicación de ilusiones, para que ya no sufras más y develes las respuestas del misterio. Si conoces algún otro ¡háznoslo saber!
¿Cuántos cuadrados hay?
Este es uno de los restos más populares. Lo primero que debes saber es que el reto en sí es un cuadrado y que después puedes ir sumando los pequeños, los del medio y los sobrepuestos. ¿Hallaste un total? La respuesta es 40, si no concuerda con tu número, aquí puedes ver la respuesta.
¿Cuántos triángulos hay?
La mecánica es la misma que el de los cuadrados, pero esta vez con triángulos. Alguien se tomó la molestia de hacer un vídeo con la respuesta de 27 triángulos.
¿Cuántas columnas hay?
No te mates demasiado en intentar dar con la respuesta correcta, pues no existe. Esta imagen es una ilusión óptica. Si te fijas, al inicio de las estructura las columnas –aparentemente dos- son perfectamente cuadradas, pero al final –supuestamente tres- resultan que son cilíndricas. Solo se trata de una imagen curiosa dispuesta a romperte la cabeza.
¿Quieta o en movimiento?
Está inmóvil. ¿No lo parece? Esta es una ilusión óptica muy atractiva, pues la disposición de las figuras oblicuas en combinación con los colores, hace pensar que se encuentra en movimiento, pero solo es una broma de nuestra mente. Sin embargo, si fijas la mirada en algún punto de la imagen, verás cómo sorprendentemente pareces lograr retener el movimiento por unos instantes ¡Súper interesante!
¿Son todos los cuadrados iguales?
Si lo son, aunque algunos no lo parezcan, tienen el mismo tamaño y están ubicados de forma perpendicular y no inclinada.
Este fenómeno óptico la observó por primera vez el psicólogo Richard Gregory en la pared de un café, alicatada con azulejos blancos y negros.
Según la disposición geométrica de los azulejos, se produce una ilusión óptica en la que éstos dejan de tener el mismo tamaño y las líneas paralelas de separación se vuelven oblicuas. Esto es debido a que el cerebro no puede ver la pared como un todo y separa las zonas oscuras de las claras. Para evitar el contraste entre el blanco y el negro, nuestras neuronas tienden a convertir los claros en oscuros y los oscuros en claros.
¿Una locura cierto?
Desde La Plaza /ABD