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¿Qué sucede con la consciencia al morir?

¿Qué sucede con la consciencia al morir?

La luz al final del túnel,   ¿Un engaño del cerebro  o una vivencia real?

¿Qué pasa con nuestra consciencia luego que el corazón deja de latir y damos un último suspiro?   Aquí los  científicos, tienen palabras para describir y explicarnos un poco estos sucesos.

Muchas personas  que han tenido una experiencia cercana a la muerte describen una luz al final de un túnel o cierta visión, pero no tenemos certezas ya que, hasta ahora, nadie que haya muerto de verdad resucitó.

Qué pasa con el cerebro al morir

Una vez que los principales órganos y sistemas del cuerpo humano dejan de funcionar, perderemos signos vitales y se nos categoriza como muertos clínicamente. Se pensaba que al dejar de respirar y tener pulso todo el cuerpo se apagaba, pero ahora se sabe que el cerebro se toma algo más de tiempo.

Según la neurocientífica Jimo Borjigin, la muerte no es cruzar una línea, sino que un proceso. Una vez que nuestros signos vitales se apagan, el cerebro sigue funcionando por medio minuto más.

En ese medio minuto, se produciría el viaje que lleva finalmente la muerte y, en que rotamos entre consciencia e inconsciencia. La prueba estaría en las personas que lograron salvarse de la muerte luego de haber perdido sus signos vitales.

Una de cada cinco personas que tuvo un roce personal con la muerte, describe experiencias que quedan guardadas en su memoria y que van desde ver una luz brillante a encontrarse con personas que fueron significativas en su vida, entre otras cosas más.

A este tipo de casos, se les denomina NDE (Experiencias cercanas a la muerte) y la ciencia busca formas de saber si son reales o solo un engaño de un cerebro que se está apagando.

Nuestra conciencia al morir

Existen datos contradictorios acerca de qué pasa en nuestro cerebro a punto de morir. Algunos científicos indican que se trata de un engaño del cerebro, mientras que otros creen que puede tratarse de experiencias reales.

George Mashour, un anestesiólogo norteamericano, cree que la consciencia está en la raíz de nuestro cerebro y, al acercarnos a la muerte, nos lleva a la frontera entre el existir o dejar de hacerlo.

Por supuesto que en la ciencia toda hipótesis debe ser probada, y por ello se realizó un estudio con ratones, midiendo su actividad cerebral luego de morir mediante eutanasia. A estos ratones se les había colocado previamente electrodos en diferentes zonas de su cerebro. Los científicos lograron describir qué pasó con su cerebro después de la muerte clínica (sin latido cardiaco ni respiración).

Las neuronas de los ratones siguen enviando señales de forma rápida por entre 22 y 55 segundos. Si bien en un principio estas pueden ser débiles, hay un momento en que aumentan notablemente. La sincronización neuronal durante ese periodo es el doble de fuerte que cuando los ratones están anestesiados o despiertos. Si bien se sabía que había actividad neuronal, nunca se imaginó que fuera tanta.

Ante los datos entregados por este experimento, los científicos concluyeron que quienes pasan por una experiencia cercana a la muerte tienen activos los centros visuales y memoria, por lo que pueden reconocer personas o hechos, para luego recordarlas.

Si bien el experimento fue en ratones, obviamente no se puede hacer en personas, ahora sabemos que la consciencia sigue presente en el cerebro tras la muerte clínica, de la cual es posible volver a menos que se produzca muerte cerebral, tras lo cual se declara a la persona como muerta oficialmente.

Gracias a las conexiones y sincronización cerebral, habría una fuerte actividad durante esos segundos donde estamos más cerca de la muerte que de la vida, descartando que se trataría de solo un sueño. Solo queda saber qué tan reales son esas experiencias: acaso son fruto de un cerebro activo o, realmente hay un componente de otro mundo y que quizá nunca podremos entender.

Desde La Plaza / OjoCientífico / JT

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