Como suele ocurrir con estas campañas que quieren irrumpir de manera diferente, la forma llama más la atención que el contenido.
La iniciativa fue de la organización KCKH8. En el video se ven pequeñas de 6 y 13 años rechazando la violencia de género con un tono agresivo y decenas de groserías: «No soy una jodida princesa indefensa», mientras se pregunta si es más ofensiva la palabra «jodida» o la desigualdad del género femenino en la sociedad.
El video ha generado polémica por el lenguaje que usan las niñas, pero Mike Kon, productor del video, asegura que pese a que los adultos pueden sentirse incómodos, lo hacen por una buena causa.
Desde la Plaza/Pulzo/AMH