Investigadores de la Universidad de Bristol y de la Universidad of the West of England en el Reino Unido han publicado un estudio con sus conclusiones sobre una bomba alimentada por orina humana que podría servir para generar electricidad y proporcionársela a robots.
La investigación consiste en el estudio de celdas de combustible biológicas o microbianas, que convierten la energía química de un compuesto como la glucosa o el acetato a energía eléctrica mediante la acción bacteriana. Y la orina humana es uno de los “combustibles” que podrían utilizarse para esas bombas o “corazones artificiales”.
De hecho, esas bombas funcionan de forma similar al corazón humano. Tras llenar el circuito con orina se aplica una corriente eléctrica que calienta las fibras y hace que se contraigan, lo que comprime una de las partes básicas de la bomba y eso hace que el fluido salga por un conducto de salida.
El ciclo se repite y eso genera electricidad para los llamados EcoBots, robos autónomos energéticamente hablando y que tienen cabida en escenarios sobre todo orientados a tareas ambientales como la medición de la calidad del aire o los niveles de polución.
Estos investigadores creen que estos EcoBot podrían alimentarse por tanto de los residuos que se recolectarían en baños públicos, por ejemplo, y que se utilizarían para esas redes de sensores distribuidos en áreas urbanas.
Desde La Plaza /Xataca /ABD