La comediante estadounidense, Joan Rivers, murió a causa de la falta de oxígeno en la sangre, a raíz de las complicaciones terapéuticas durante un procedimiento al que se sometió para evaluar sus cambios de voz y su reflujo estomacal, informo la oficina del forense de Nueva York.
“La clasificación de una muerte como una complicación terapéutica significa que se debió a una complicación previsible del procedimiento médico”, señala el reporte emitido hecho público el jueves.
Rivers, de 81 años, murió a principios de septiembre, una semana después de entrar en un coma inducido, luego de presentar un problema respiratorio y cardíaco durante una cirugía.
El forense a cargo de la investigación informó que la causa de muerte fue “encefalopatía por anoxia debido a un paro hipóxico”, una descripción médica de daño cerebral causado por la falta de oxígeno.
El ataque ocurrió “durante la laringoscopia y la endoscopia digestiva con el sedante propofol para la evaluación de los cambios en la voz y la enfermedad por reflujo gastroesofágico”, señaló el forense.
El reporte inicial no nombra al doctor o doctores que realizaron el procedimiento
Desde La Plaza/CNN/COM