Al menos diez personas han fallecido en Filipinas a consecuencia del paso del tifón ‘Rammasun’, que ha alcanzado la capital, Manila, forzando la evacuación de alrededor de 150.000 personas y el cierre de los mercados financieros, los edificios gubernamentales y las escuelas.
El presidente de la Cruz Roja Nacional de Filipinas, Richard Gordon, ha afirmado que el ‘Rammasun‘ ha provocado daños en Manila, si bien su personal está intentando rescatar a varias personas que han quedado atrapadas tras el derrumbe de varios edificios. Además, dos personas han muerto tras ser electrocutadas en el sur de la ciudad.
El tifón ha registrado vientos de hasta 120 kilómetros por hora, con ráfagas que han alcanzado los 150 kilómetros por hora en su zona central, tocará tierra entre las provincias de Albay y Sorsogon (este). El ‘Rammasun’ ha sido calificado como de categoría uno (en una escala de uno a cinco).
Varias partes de Filipinas se están recuperando aún del paso del tifón ‘Haiyan’, un supertifón de categoría cinco que arrasó parte del país en noviembre. El «Haiyan«, considerado uno de los ciclones más potentes de la historia moderna, mató a unas 6.300 personas en el país.
Rhea Catada, que trabaja para la organización no gubernamental Oxfam en Tacloban –la ciudad más afectada por el «Haiyan»-, ha dicho que miles de personas que residían en tiendas de campañas han sido trasladadas a zonas de mayor altura
Están asustados, ya que sus experiencias durante el «Haiyan» el año pasado siguen estando frescas. Ahora están evacuando de forma voluntaria y dejando atrás sus pertenencias«, ha apuntado Catada.
Desde la Plaza/EFE/AMH