¿Has oido hablar de los Iluminati? Seguro que sí, cuando escuchas el nombre de esta sociedad «secreta» vienen a tu mente una serie de mitos que rayan en lo absurdo. Pero esta vez el secreto «mejor escondido» de esta comunidad por fin va a ver la luz del sol, ¡y con pruebas!
Una vieja carta del fundador de la caótica y poética religión discordiana, Greg Hill, explica que los antiguos miembros de los Illuminati crearon una enclítica sobre la marca de los verdaderos miembros de esta organización, los cuales debían ser reconocidos por un signo visible (aunque no abiertamente, había que penetrar el sanctum sanctorum: deus absconditus) de su iluminación.
En la carta Hill sentencia que el signo divino del ojo en la pirámide a veces ubicado en la frente ahora sería encontrado en la anatomía del iniciado pero en el ano, «en un secreto lugar profundo dentro del propio hoyo en el ano», emblema irrefutable de la existencia de la «Profunda Luz».
Hill pide, para «reconocer a los elegidos», esperar el momento apropiado para «casualmente mirar dentro de su ano. Y si ves el Ojo mirándote a ti –realmente sí es un Iluminado». Siendo una sociedad secreta, el ojo debe estar cubierto por máxima celosía.
Así que ya sabes, si quieres determinar si alguien es Illuminati, tienes que verlo fijamente dónde no le pega el sol, busca el ojo con su luz de oro anal en el microcosmos anatómico de la pineal.
Y que la «Profunda luz» de los Illuminati los acompañe.
DesdeLaPlaza.com/PijamaSurf/KR