En avión, desde las grandes capitales europeas o desde las cumbres nevadas de un archipiélago perdido en medio del Ártico, buena parte del hemisferio norte asiste este viernes al espectáculo mágico de un eclipse solar, siempre que la meteorología lo permita.
Desde primera hora de la mañana, los científicos han empezado a observar desde el océano Atlántico cómo la luna escondía parcialmente el sol.
“Es muy bonito. Es uno de los espectáculos astronómicos más maravillosos que se pueden ver”, declaró a la AFP el astrofísico Alfred Rosenberg, uno de los primeros que han podido disfrutar del evento desde el observatorio de las islas Canarias.
El eclipse será luego visible en Europa, el noroeste de África y Asia, y en Oriente Medio, antes de terminar su recorrido cerca del Polo Norte.
Como es habitual, las autoridades han multiplicado las advertencias, exhortando a la población a llevar gafas de protección especial para evitar graves lesiones oculares.
Por casualidad, el eclipse coincide con el equinoccio de primavera, cuando el sol pasa del hemisferio sur al hemisferio norte, así como con la “Superluna” (luna llena en perigeo, el punto en que el satélite se halla más próximo a la Tierra).
La alineación entre la Tierra, la luna y el sol será seguida de grandes mareas el sábado en las costas del Atlántico, el canal de la Mancha y el mar del Norte.
A continuación te dejamos una galería del espectacular fenómeno:
DesdeLaPlaza.com/Agencias/AMB