Arrestan a un pizzero por restregar sus genitales en la comida de un cliente

Austin Michael Symonds trabajador de pizzaeria

Brent Bradley llegó a la pizzería Papa Murphy de Georgetown, Texas, minutos antes de la hora de cierre del local y pidió su hawaiana. Mientras esperaba que le sirvieran su comida, se asomó al otro lado de la barra y vio cómo Austin Michael Symonds, el empleado, se pasaba la comida por el forro. ¡Literalmente! Por el forro o la bolsa escrotal, puede llamarse de muchas maneras, claro.

Indignado, Brent increpó al muchacho, que no tuvo reparos en reconocer su responsabilidad al tiempo que se disculpaba con un escueto “I’m really sorry!” (¡lo siento mucho!) y reconocía que lo que había hecho era “algo estúpido”.

Tras las disculpas, el cliente le preguntó su edad a Symonds, que le dijo tener 18 años. “Por tanto, eres lo suficientemente mayor como para saber lo que has hecho”, le respondió y llamó a la policía para denunciar el asunto.

El joven pizzero admitió los hechos sin mayor resistencia y los agentes del orden se lo llevaron arrestado, acusado de alterar un producto de consumo. Tras pagar una fianza de 10.000 dólares, el muchacho fue puesto en libertad y, por supuesto, despedido de su trabajo en la pizzería.

A su favor, el tipo, aunque cochino, es bastante honrado. Al gerente de Papa Murphy le confesó que se restregó la pizza por los testículos en venganza porque el cliente hizo su pedido cuando estaban a punto de cerrar y también admitió que si no le hubiera pillado, muy probablemente, le habría entregado la pizza.

Desde la Plaza/Daily News/AMH

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