Se trata de Molly Blair, la adolescente de 17 años que fue descubierta en julio de 2014, mientras hacía compras en un mercado, ahora desfila en Nueva York para Proenza Schouler, en Milán desfiló para Prada y en París consiguió lo que toda modelo sueña, cerrar un desfile de Chanel.
En menos de un año la joven es la modelo más deseada por las firmas más importantes de la moda.
Pero las cosas no siempre fueron tan glamurosas para Bair, en el colegio fue víctima de bullying pues sus compañeros la llamaban “cara de rata”, “alien” o “mantis religiosa”.
Y es que las facciones que sus compañeros veían como “fealdad”, son las que le han significado conquistar el mundo de la moda, el cual aprecia ese rostro “alienígena” que se ha convertido en protagonista de editoriales de Vogue Italia, Love Magazine y W Magazine.
“Creo que ser modelo me ha abierto los ojos respecto a la belleza en general. Pienso que la belleza real proviene de lo único. Tenemos que dejar de pensar que todos tenemos que tener la piel o las pestañas perfectas. Ser feliz y estar seguro de uno mismo es genial”, expresó Bair en una entrevista a CNN.
Dejando atrás a los que la molestaban, ahora la “chica cara de rata” camina bien aplaudida por las pasarelas de Alexander Wang, Marc Jacobs, Gucci, entre otros, además de entablar amistad con una de las modelos del momento, Kendall Jenner.
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