Hace 137 años nació en Ucrania Lev Davídovich Bronstein (León Trotski) político, escritor y revolucionario ruso; clave en la instauración y posterior supervivencia del primer régimen comunista del mundo.
Se unió al partido de Lenin, asumiendo la presidencia del Soviet de Petrogrado y la del Comité Central. Además presidió el Comité Militar Revolucionario, desde el cual guió con la Revolución de Octubre de 1917 que colocó a los bolcheviques en el poder.
Trotski defendía la idea de la «revolución permanente» como vía de realización de los ideales marxista-leninistas (extendiendo gradualmente la Revolución a Alemania y a otros países).
Escribió numerosos ensayos, una autobiografía, Mi vida (1930), una Historia de la Revolución Rusa (1931-1933), Terrorismo y Comunismo y La revolución traicionada (1937).
Fue perseguido y exiliado por sus críticas a Joseph Stalin y finalmente fue asesinado por Ramón Mercader, en Coyoacán, México, el 21 de agosto de 1940.
Aquí te dejamos las 7 frases famosas de León Trotski:
«Quien se arrodilla ante el hecho consumado es incapaz de enfrentar el porvenir».
«Que Stalin alcanzase su posición fue la suprema expresión de la mediocridad del aparato».
«Sin una organización dirigente la energía de las masas se disiparía, como se disipa el vapor no contenido en una caldera. Pero sea como fuere, lo que impulsa el movimiento no es la caldera ni el pistón, sino el vapor».
«Exponer a los oprimidos la verdad sobre la situación es abrirles el camino de la revolución».
«La vida es hermosa. Que las futuras generaciones la libren de todo mal, opresión y violencia y la disfruten plenamente» (de su testamento).
«La propiedad del Estado no es la de ‘todo el pueblo’ más que en la medida en que desaparecen los privilegios y las distinciones sociales y en que, en consecuencia, el Estado pierde su razón de ser. Dicho de otra manera: la propiedad del Estado se hace socialista a medida que deja de ser propiedad del Estado» (de La revolución traicionada).
«El patriotismo es la principal parte de la ideología mediante la cual la burguesía envenena la conciencia de clase de los oprimidos y paraliza su voluntad revolucionaria».
DesdeLaPlaza.com/Agencias/KM