«Después de leer un libro, uno no vuelve a ser el mismo». ¿Cuántas veces habremos oído esa frase? La literatura es capaz de abrirnos nuevos horizontes, permitirnos viajar fuera de nuestras fronteras y hacer volar la imaginación más allá de unas simples páginas de papel. El 23 de abril es el Día del Libro y, para celebrarlo, hemos seleccionado cinco clásicos apasionantes que como buen lector no deberías dejar de leer.
Anna Karenina, de León Tolstoi
Esta es una de esas obras clásicas de la narrativa que permanecen a través de generaciones debido a lo que refleja, pues sus acciones logran que el lector se identifique con sus personajes. El libro ha sido adaptado varias veces para crear versiones cinematográficas que presentan la historia de la protagonista: Anna; una mujer de la aristocracia rusa quien se deja llevar por la pasión, acabando con su matrimonio; dicha toma de decisiones la lleva a convertirse en el centro de la polémica en una Rusia donde el divorcio y la infidelidad son parte de la vida cotidiana en la intimidad del hogar, pero la comidilla en las calles y las salas de baile.
Madame Bovary, de Gustave Flaubert
Una novela controversial que dejó en evidencia a la sociedad francesa del siglo XIX; Madame Bovary, de Gustave Flaubert, fue publicada el 12 de abril de 1857, convirtiéndose, hasta la fecha, en una de las novelas más importantes de la literatura universal. El realismo, que estaba en pleno auge, se ve reflejado en la pluma de Flaubert y en su manera de documentar la realidad francesa.
Guerra y paz, de León Tolstoi
Esta es considerada como la obra cumbre del autor junto con su otro trabajo, Anna Karénina. En Guerra y paz, Tolstoi quiso narrar las vicisitudes de numerosos personajes de todo tipo y condición a lo largo de unos cincuenta años de historia rusa, desde las guerras napoleónicas hasta más allá de mediado el siglo XIX.
Lolita, de Vladimir Nabokov
Este clásico de la literatura erótica, obra del escritor ruso Vladimir Nabokov, continúa siendo uno de los títulos más representativos del género desde que se publicó por vez primera en 1955. Esta novela trata el escabroso tema de la atracción que puede llegar a sentir un hombre mayor por una mujer joven, específicamente una niña de 12 años.
Las aventuras de Huckleberry Finn, de Mark Twain
El protagonista de este libro es un niño desharrapado, que no va a la escuela, roba y utiliza un lenguaje “barriobajero”. A través de sus atónitos ojos de chiquillo espabilado, Mark Twain consigue realizar sus mayores ambiciones literarias, pues a partir del color local creó una historia universal cuyo impacto en el lector es profundo y duradero: todo un clásico de literatura universal.
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