Finalizó este jueves el Congreso Mundial de Telefonía Móvil (MWC 2014) que se celebró en la ciudad de Barcelona, España, y como cada año ha dejado mucho de qué hablar y esperar.
El evento fue escenario del lanzamiento de nuevos productos y múltiples anuncios, que marcarán tendencia durante los próximos doce meses. Este es un breve balance de lo mejor y lo peor de esta importante feria, según el portal Celularis.
Lo mejor
Samsung Galaxy S5. Este nuevo smartphone de Samsung convenció con un diseño bastante bueno y una presentación en cuatro colores: blanco, negro, azul y morado. Además, la empresa centro sus novedades en aspectos importantes, como la rapidez de enfoque de la cámara, el modo de ahorro de batería, o la propia duración de la batería.
La presentación de Samsung. En el 2013, Samsung hizo una presentación de dos horas que simulaba más un musical rancio, que de lanzamiento estrella. Este año, por el contrario, la presentación fue algo breve, directa al grano y centrada en el producto.
Gear Fit. Este wearables tiene una pantalla curvada, bastante discreta y con funciones directas, más allá de atajo entre nuestros ojos y el smartphone. Como las aplicadas a la monitorización de la actividad física.
Nokia X. La estrategia de Nokia con la familia X fue interesante e intrigante. Uso el atractivo de las aplicaciones de un Android para «atrapar» a los usuarios en los servicios de Microsoft, y quizás en un futuro, catapultarlos a Windows Phone donde tienen una interfaz, unos servicios y unos dispositivos que ya les serán familiares.
Nokia 220 y Firefox OS por 25 dólares. Estas grandes empresas pensaron en los mercados que no tienen el poder económico para adquirir teléfonos celulares que sobrepasan el valor de 100 dólares. Ahora, estarán disponibles estos dispositivos con capacidades de acceso a Internet y redes sociales por tan solo 25 dólares.
Lo peor
Grandes marcas, pequeños protagonismos. HTC decidió dejar la presentación de su Smartphone estrella para el mes de marzo en un evento exclusivo, desaprovechando la oportunidad de poner los ojos del mundo en su nuevo HTC One para dejárselo a un número selecto de personas.
LG tampoco tuvo demasiado protagonismo, su LG2 Mini no tiene nada de gama alta. Mientras que el LG G Flex todavía no ha dejado claro cuál es su valor añadido por ser curvo, al margen de su espectacular carcasa autorreparable.
El discurso de Yoigo. Su CEO, Eduardo Taulet, dijo que los servicios que usen sus redes, deberían pagar a las operadoras por ello, poniendo el ejemplo de WhatsApp. O sea, pagar por los servicios de mensajería instantánea, a pesar que colocar valor a cada mensaje ya es cosa del pasado.
Wearables mediocres. Un buen ejemplo de esto es Talkband, la propuesta de Huawei. Su correa es bastante acertada en diseño, y el hecho de incluir en ella un conector USB. Pero lo de ese enorme auricular, pantalla que se puede extraer y colocar en la oreja para hablar por teléfono es, en una palabra “creepy”. Y muy grueso.
La sensación de que a Sony le faltó rematar. No es que el Xperia Z2 sea de lo peor del MWC2014 ni mucho menos, de hecho es un buen terminal. Pero no ha corregido algunas carencias del Z1, como los grandísimos marcos y no ha aportado demasiado respecto al modelo anterior. Da la sensación de que se podría haber hecho algo más.
Los stands de fabricantes chinos. Pasaron desapercibidos y con razón. Decepción absoluta, no tenían nada llamativo que mostrar, nada atractivo. Nadie duraba mucho allí viendo la mala organización que tenían, así como la baja calidad de lo que mostraban.
Desde La Plaza /Celularis /ABD