Casi 150.000 personas firmaron una petición para impedir que Kanye West actuara en esta edición de Glastonbury y que una banda de rock ocupase su lugar en el festival de festivales.
Aunque la petición online no consiguió su objetivo, el rapero intentó satisfacer las ansias rockeras de los asistentes (o provocarles un poco más) interpretando durante unos segundos la mítica Bohemian Rhapsody de Queen.
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Después de que sonaran las primeras notas de la canción, West pronunció torpemente y desafinó las frases iniciales del tema de Queen.
Aunque el público se entusiasmó con la cover y no dudaron en acompañarle (ayudándole a camuflar su desatino), poco después las redes sociales ardieron y criticaron la versión y convirtiendo Bohemian Rhapsody en trending topic.
Kanye, en su línea de llevar la provocación al extremo y generar titulares, no dudó en rematar la jugada autoproclamándose como “la mejor estrella de rock viva del planeta”.
Al parecer no todo en el espectáculo de West fue criticable. Según recoge The Guardian, contó con la participación de Justin Vernon (Bon Iver) y el humorista Simon Brodkin le dio un toque divertido al show al interrumpir su interpretación de Black Skinhead.
A continuación las reacciones de los tuiteros:
DesdeLaPlaza.com/El País/Twitter/AMB