El cortometraje “La culpa, probablemente”, del joven realizador Michael Labarca se llevó un galardón en la categoría Cinéfondation del Festival Internacional de Cine de Cannes. A raíz de este premio, se ha estado hablando de los cortometrajes y de la importancia que tienen como iniciativa para todos aquellos que desean hacer cine.
Julio Cortázar en uno de sus ensayos sobre el cuento, compara a este género literario con la fotografía “una fotografía lograda presupone una ceñida limitación previa, impuesta en parte por el reducido campo que abarca la cámara y por la forma en que el fotógrafo utiliza estéticamente esa limitación” escribió el argentino.
Cuando pienso en cortometrajes recuerdo esa analogía, los cortometrajes reflejan una historia que tiene ciertas limitaciones, narran un momento, una circunstancia particular, como sucede en el cuento.
La mayoría de los cortometrajes de calidad, suelen ser impactantes, cuentan una historia contundente que tiene una resolución rápida.
Hacer un buen cortometraje puede ser un riesgo, ya que se cuenta con poco tiempo para exponer el universo de una historia y que pueda resultar verosímil. En este tipo de cinta, la creatividad y el poder de síntesis de su realizador cuentan.
Hasta hace poco las salas de cine nacionales los exhibían, como parte de la iniciativa Venezuela en Corto, la cual permitía la difusión de cortometrajes venezolanos.
En nuestra época, las plataformas digitales para compartir videos como YouTube, permiten disfrutar de infinidad de cortos, algunos de los que recomiendo con entusiasmo son los siguientes:
-“Esclavos” y “800 Amor” del venezolano Michael Labarca. A raíz del premio que recibió en Cannes, visité el canal en YouTube de este joven realizador y descubrí cortometrajes interesantes, con historias fuertes.
“Esclavos”. Profundamente realista e impactante.
“800 Amor”. Una historia de amor o de como el amor puede ser esquivo.
“Dinero Fácil” de Carlos Montero. En este corto protagonizado por el actor español Mario Casas, hasta el último minuto te darás cuenta de lo difícil que es ganar “dinero fácil”. Excelente.
“Allanamiento de morada” de Mateo Gil. Este corto ya es casi un clásico, ganó premios y reconocimientos hace unos años. Protagonizado por Eduardo Noriega, fue uno de los primeros experimentos del realizador español Mateo Gil, quien escribió películas geniales como Tesis, Abre los ojos junto a Alejandro Amenábar y dirigido cintas como Nadie conoce a nadie.
“Push up” de David Galán Galindo. Divertido e ingenioso cortometraje finalista de la XI edición de Jameson Notodofilmfest.
“Gilipollas”. Vale la pena ver este corto también finalista de la X Edición de Jameson Notodofilmfest.
“Luna” de Alejandro Amenábar. Protagonizado por Eduardo Noriega, es uno de los primeros acercamientos de Amenábar al cine, si conoces su filmografía descubrirás en Luna algo que caracteriza especialmente a las cintas de este director español, el carácter de la música incidental.
@luisauguetol