El día de hoy todos los venezolanos despertaron con la noticia que el cantante Yordano Di Marzo confesó -en una entrevista concedida para el canal televisivo CNN-, que sufre del Síndrome Mielodisplásico, que impide a la médula ósea producir suficientes células sanguíneas y puede convertirse en Leucemia.
En Desde La Plaza, te presentamos algunos datos curiosos de la vida del músico, compositor e intérprete ítalo-venezolano Yordano en sus primeros pasos.
Sabías que el nombre verdadero de Yordano es Giordano Di Marzo Migani, nació el 27 de octubre de 1951, en la ciudad de Roma (Italia), hijo de padres italianos y hermano del también cantautor Evio Di Marzo.
Ahora se preguntarán ¿pero si nació en Italia por qué dicen que es venezolano?, simple, porque si bien es cierto que no nació en tierra venezolana, también es cierto que siempre ha vivido en Venezuela desde sus tres añitos de edad, convirtiéndose en un criollito, como dirían por ahí “más criollo que una arepa”.
Muchos piensan que el cantante solo se preparó en el ámbito musical, pero no es así, se graduó de Arquitecto en la Universidad Central de Venezuela.
Su tartamudez no fue limitante para experimentar en el mundo de la música, es así como en la década de los 70 da sus primeros pasos como cantautor.
En 1979, publicó su primer disco convirtiéndose en un boom en países de América Latina como: Colombia, México, Ecuador, Argentina y Chile. Aunque muchos cantaban sus coros, no sabían que el cantante era un venezolano.
En ese año, junto al grupo Sietecueros, integrado también por su hermano Evio, Alberto Slezynger y otros talentosos músicos, edita su primer LP (disco de larga duración), Rojo Sangre, en el que ya se notaba su vocación por mezclar elementos de sonidos eléctricos y acústicos.
Yordano, en diversas entrevistas ha confesado que tiene influencias musicales que van desde la italiana y los danzones del Caribe, pasando por el Rhythm and Blues y los Beatles, desde Marvin Gaye hasta Barbarito Díez y Willie Colón.
A paso corto, pero firme, logró colocarse en el cúspide del movimiento pop venezolano de los 80 y consagrarse como artista a nivel internacional, siendo sus baladas más conocidas Perla negra, del álbum Jugando conmigo (1986), sin olvidarnos del álbum Epónimo (1984) donde las más coreadas fueron: Manantial de corazón, Bailando tan cerca y Aquel lugar secreto.
Di Marzo, se mantuvo en la cima y se convirtió en la sensación de los años 90, quién no se acuerda del famoso coro “Voy arrancarte esa mirada de animal mal herido, y que tus ojos se convenzan de la suerte que tuvimos. De tener madera fina, madera fina… Ah ah, ah ah…” ¡Sí! Madera Fina, de su álbum Finales de Siglo.
Su popularidad en esta época se afincó especialmente a raíz del éxito de la telenovela «Por estas calles», cuyo tema musical homónimo está incluido en su trabajo De sol a sol (1992). La canción sonó de manera ininterrumpida durante el largo período de emisión del programa.
Pero no todo es oro, por algo el famoso dicho “la vida es como una montaña rusa”, ¿por qué lo digo? A mediados de esa década, compone y produce dos álbumes de tono más íntimo y minimalista: Sabor de cayena (1994) y Fiebre en (1996). Éste último fue ignorado por las radios y el público.
Durante esta etapa, Yordano armó una banda experimental, manteniendo un bajo perfil que le permitió explorar más cómodamente otras tendencias musicales, como el blues, apoyado en el escenario de un local nocturno caraqueño, del mismo artista “ad hoc”.
Si algo siempre ha tenido claro el cantautor de “Madera Fina”, es que el éxito no llega solo, se busca. Es por eso que se lanzó a la aventura independiente y comenzó a realizar conciertos, «disco doble” grabado en vivo (que incluía sus mayores éxitos) , entre otras actividades para reconquistar a su público.
Es así, como en un par de años después edita Que Lindas Son, un compendio de canciones caribeñas como «Frenesí», «Cómo fue» y «Te quiero dijiste», co-producido y arreglado por el guitarrista venezolano Eddy Pérez, donde dejo ver otra faseta.
Yordano, reapareció en 2002 con Secretos de la Noche, un excelente álbum de 13 canciones nuevas, en donde se pueden apreciar, mezclas de sonidos y de instrumentos como las del cuatro, violín y algunos repuntes electrónicos muy leves.
Los años pasan, y una vez más el cantautor logra sorprendernos con su producción discográfica titulada El deseo (2008) con 18 temas donde muestra su vena rockera, y que en tiempo récord se convierte en Disco de Oro y de Platino.
En “El deseo” participan como invitados especiales el colombiano Jorge Villamizar (ex integrante de la agrupación Bacilos) con el tema “Yoyoman”, pieza que contiene elementos autobiográficos y el venezolano Arístides Barbella (integrante de Malanga) con la canción “Puja”. Esta vez aposto al Rock Latino, y gano.
El que no arriesga no gana.
Actualmente sus seguidores se deleitan con su recién disco “Sueños Clandestinos” (2013), a través de su cuenta en Twitter @YordanoOficial y su página web da la oportunidad de descargar los tres temas promocionales: Manifiesto, Quiero Vivir y Un Gran Adiós.
Su trabajo y estilo es único e incomparable, logrando marcar historia en el arte de la música, entrar en los corazones de muchas personas, como todo un buen venezolano.
Desde La Plaza /SE