La tragedia de este “artista” canadiense, que parece caminar a pasos agigantados rumbo al más definitivo de los abismos, no termina.
Justin Bieber fue acusado por intento de robo en el Valle de San Fernando, en California. Una mujer señaló al cantante canadiense de haber intentado robar su teléfono celular.
La mujer dijo a TMZ que la noche del lunes ella estaba con su hija de 13 años en un complejo de mini golf llamado “Sherman Oaks Castle Park”, y que de pronto alcanzó a ver a Justin Bieber y sus amigos en el mismo lugar.
El cantante y sus acompañantes empezaron a tener un altercado con otros jóvenes que andaban por ahí. Ella sacó su teléfono para tomar fotos y video de todo lo que estaba pasando.
Ella indicó que el cantante la enfrentó y le exigió ver su teléfono para borrar las fotos que pudiera haber tomado. Como ella se negó, él metió la mano en su bolso y se lo quitó.
Según las declaraciones de la mujer, ambos comenzaron a forcejear por el aparato. Al final, Justin se lo devolvió, pues no lo pudo revisar debido a que el teléfono estaba bloqueado.
La asustada mujer enseñó a al cantante canadiense que no había fotos de él en su teléfono y le explicó que su hija sólo quería decirle ‘hola’.
En seguida el cantante comenzó a gritarle y le dijo que ya no se humillara más ante su hija y que se fuera de ahí lo más pronto posible.
TMZ obtuvo una imagen donde se ve a un guardia del parque de mini golf tratando de calmar la situación. La policía de Los Ángeles fue a la casa de la acusante para tomar su reporte y dar inicio a la investigación.
Bieber es producto de un mundo que premia la apariencia, la tenencia y el poder, un mundo el que las cosas, son mucho más importantes que las personas. Él es la viva imagen de los estragos del capitalismo.
Desde la Plaza / TMZ/ AMH