A una semana de la muerte de la actriz, comediante y conductora del espacio “Fashion Police”, Joan Rivers, siguen aumentando los rumores sobre las posibles causas de su muerte.
Esta vez, la versión de que la artista de 81 años sufrió un shock cuando fue anestesiada con Propofol -un potente medicamento utilizado en cirugías menores- ha cobrado mayor fuerza.
Aunque los resultados de la autopsia practicada a Rivers no fueron concluyentes, el departamento de salud de Nueva York realizó las investigaciones pertinentes y centró su búsqueda en la clínica Yorkville Endoscopy para determinar si hubo mala praxis durante la intervención de garganta a la que se sometió la intérprete estadounidense.
Diversas fuentes aseguraron que el mal uso de este anestésico fue el detonante de las complicaciones que sufrió la líder de los ‘Joan Rangers’ y le causó la muerte. Sin embargo, aún se esperan los resultados de los exámenes toxicológicos y las declaraciones de los médicos involucrados en la fatídica operación.
La utilización de esta droga es común en los diversos centros asistenciales de Nueva York, no obstante, algunos especialistas aseguran que el Propofol “es un medicamento muy seguro pero que puede provocar eventos desafortunados como cualquier anestésico potente”. Sin embargo, fue por una sobredosis de este fármaco que Michael Jackson murió en el año 2009.
Al parecer, Melissa Rivers, hija de la comediante estaría preparando una demanda al centro clínico por presunta mala praxis ya que el cardiólogo de su fallecida madre autorizó llevar a cabo la endoscopia pues la misma “se encontraba en perfecto estado de salud”.
Desde La Plaza/Infobae/COM