La crítica británica se ha explayado en elogios para la obra de Harry Potter y el niño maldito. «Deslumbrante» y «un triunfo» han sido parte de los cumplidos que ha recibido la nueva obra de J.K Rowling que se estrenó este viernes en el West End de la capital británica.
El escocés John Tiffany es el encargado de dirigir sobre las tablas la nueva historia del famoso mago huérfano. Las entradas de la obra ya están vendidas hasta mayo de 2017. Consta de dos partes de dos horas y media y se sitúa 19 años después del final de Harry Potter y las reliquias de la muerte.
Lo que ha desatado la nueva obra ha sido una fiebre voraz en Inglaterra. Tanto ha sido que los organizadores anunciaron que el 4 de agosto pondrán a las venta 250 mil entradas más. En algunas páginas de Internet las estaban revendiendo en más de mil euros.
“Para más de 50% de los espectadores esta será la primera vez que acuden al teatro y más de 50% de ellos son menores de 35 años, lo que supone una verdadera evolución para la industria”, señaló la productora Sonia Friedman en una entrevista para The Guardian.
La producción del West End londinense ya ha tenido que soportar comentarios racistas por el hecho de que Hermione Granger sea interpretada por Norma Dumezweni, una actriz negra natural de Suazilandia. La que dio vida a la inteligente y dulce estudiante de Hogwarts en la gran pantalla, Emma Watson, dio sus bendiciones a la intérprete.
J. K Rowling, que ha vendido cerca de 500 millones de ejemplares de la saga en todo el mundo, se propone superar esa cifra mañana, cuando se publicará el guion de la pieza teatral, en lo que supone el primer lanzamiento en nueve años de las aventuras de Harry Potter.
DesdeLaPlaza.com/Agencias/SHV