Los seres humanos por naturaleza somos curiosos por lo que nos gusta saber más acerca de la persona que es de nuestro interés; por lo que en ocasiones sale a flote esa stalker que no siempre es fácil de controlar. Y para que no te sorprendan husmeando por las redes sociales te dejamos estos sencillos tips para stalkearlo.
1.- No utilices tu perfil. Si no eres amigo o seguidor de la persona que quieres espiar, evita hacerlo desde tu red social y utiliza un navegador donde no siempre estés conectada.
2.- Generalmente las redes sociales hacen conexiones con gente cercana, es decir con la que más interactúas, por lo que pon atención si ves que te sugieren seguido que agregues a esos que has espiado ya que tú podrías aparecer también entre sus sugerencias y sabrían que los stalkeas.
3.- Trata de controlar tus dedos. Es muy probable que entre todo lo que veas te guste una foto o un comentario, pero en caso de poner una etiqueta o un like en algo que postearon hace tiempo podría comprometerte.
4.- Espiar a tus contactos por medio de sus amigos es una técnica que a veces resulta, pero si los agregas y no tienes nada que ver con ellos, podrían bloquearte.
5.- Controla tus comentarios. Trata de no sacar a colación temas que has visto en su timeline y no has comentado con él o ella en la vida. Además de sonar extraña, podría darse cuenta de que lo espías.
6.- No dejes abierto el perfil. Nunca dejes abierto su perfil y te vayas a otro lado, mucho menos si estás en el trabajo. Alguien cercano a ti podría darse cuenta.
7.- No lo etiquetes. Si está con sus amigos o su familia no tiene caso que lo etiquetes, esa es una práctica un poco molesta.
8.- No dejes que vean tu lado acosador. Cuando suba una foto o realice un comentario trata de no ser la primera en comentar, dar likes, o retuitear.
9.- No publiques contenido referente a cosas de quien espías ni postees cosas que él habló en un post de hace años.
10.- Gobiérnate. Trata de moderar tu curiosidad. Se sabe que una actividad ya no es sana cuando roba gran parte de tu tiempo, es decir, cuando dedicas más de la mitad del día a husmear en el pasado de la gente en redes sociales; cuando te desvelas stalkeando; cuando ya sientes que no puedes empezar el día si no estás viendo las nuevas publicaciones de quien espías.
Recuerda que ser curioso es natural, pero no permitas que se vuelva una adicción.
DesdeLaPlaza.com/eme/MB