El gobernador del estado Táchira, José Vielma Mora, dijo este jueves que las deportaciones de colombianos que habitaban de manera ilegal en la zona fronteriza de Venezuela concluyeron sin que se haya producido «ninguna violación de los derechos humanos».
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En declaraciones a la televisión estatal VTV, el gobernador señaló que continúan, sin embargo, las acciones contra el contrabando y el crimen organizado en la zona.
«No hay ninguna violación de los derechos humanos, no tenemos ningún herido, fallecido, nadie golpeado, torturado, humillado. Todo ha sido bajo el espíritu voluntario de los derechos humanos», afirmó.
Vielma Mora acusó a la prensa colombiana de estarse «aprovechando para engañar al pueblo y crear toda una distorsión en la información internacional».
En su cuenta de la red social Twitter, el gobernador del Táchira reseñó que, con el cierre de la frontera, Venezuela se ahorra un millón de litros de combustible diarios.
Dijo que 40.000 vehículos cruzaban cada día el puente que une la ciudad colombiana de Cúcuta con la venezolana de San Antonio «para abastecerse de combustible y alimentos».
Al menos un millar de colombianos que habitaba de forma ilegal -muchos de ellos desde hace varios años- en la zona fronteriza han sido deportados en los últimos días hacia Cúcuta, de acuerdo con datos de Migración de Colombia.
Otros 4.260 colombianos lo han hecho por voluntad propia, según la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA).
DesdeLaPlaza.com/EFE/AQ