El ministerio de Defensa sudanés informó, que diez migrantes murieron en el desierto, entre Libia y Sudán, y más de 300 fueron rescatados, luego de haber sido abandonados por traficantes en esta zona.
Los supervivientes fueron transferidos a la ciudad de Dongola. «Los contrabandistas los abandonaron en el desierto (…) en la frontera entre Sudán y Libia», indicó el comunicado.
El territorio donde ocurrió el incidente es una región poco poblada que va desde el este de Sudán hasta la península del Sinaí en Egipto, lugar de paso de numerosos africanos que buscan escapar de la miseria.
Desde La Plaza / AFP / JT