La empresa automotriz Toyota Motors, seguirá operando en Venezuela pese a que su producción proyecta una caída de un tercio para finales de este año. Así lo señaló el Presidente ejecutivo de la compañía para la región latinoamericana Steve St. Angelo.
El mayor fabricante de automóviles del mundo tiene una planta en Cumaná, Venezuela, con una capacidad de 35.000 unidades anuales de las marcas Corolla, Fortuner, Hilux y Daihatsu Terios, pero la producción de este año solo llegará a 3.000 frente a los 9.000 en el 2013.
«Vamos a continuar. Pero también podemos decir que tenemos dificultades y he lanzado el reto al equipo para renacer y ser más competitivos en volúmenes bajos», dijo St. Angelo el jueves en una entrevista con Reuters en Bogotá, después de una visita de tres días a Venezuela.
«No estoy dando por perdida la planta en Venezuela y no me estoy dando por vencido en ese país«, afirmó al explicar que los planes de Toyota son a largo plazo y que a pesar de las dificultades cambiarias confía en que se logre una solución.
Desde La Plaza/UN/NCH