Un jet militar se estrelló el miércoles en una comunidad del desierto del sur de California, donde provocó que dos viviendas se incendiaran, pero no hay reportes inmediatos de lesionados, informaron las autoridades.
El cabo Melissa Lee, de la Infantería de Marina, dice que el piloto logró activar el sistema de eyección y fue llevado a un hospital para evaluarlo. Hasta el momento no hay reportes de lesionados en tierra.
El Harrier AV-8B cayó alrededor de las 4:20 de la tarde en Imperial, una ciudad de unos 15 mil habitantes cerca de la frontera con México a unos 145 kilómetros de San Diego. Testigos describieron una explosión y densas nubes de humo.
«Se sintió como si arrojaran una bomba en el jardín» , dijo Adriana Ramos, de 45 años, cuya casa está a menos de una cuadra del lugar del accidente. «Toda la casa se cimbró» . Ramos huyó con su nieta de 4 años y su hija de 10 años.
Otro testigo, José Santos, conducía en las cercanías y vio un avión volando «muy bajo» . Luego «simplemente se desplomó» , relató.
Santos se dirigió al lugar del accidente. En el camino vio al piloto que descendía en paracaídas. «No parecía estar herido» y un policía y otros lo estaban ayudando, dijo.
En el lugar del accidente había caos y la gente corría en todas direcciones, manifestó.
El avión pertenecía a la Base Aérea de la Infantería de Marina de Yuma, dijo la cabo Lee. No proporcionó detalles sobre lo que pudo causar el accidente.
La policía local y los bomberos refirieron las preguntas a la Infantería de Marina, mientras que oficiales federales de aeronáutica no respondieron de inmediato a los mensajes.
Es el segundo accidente en un mes de un Harrier de la base aérea de Yuma, Arizona. El 9 de mayo un piloto pudo saltar antes que su jet se estrellara en un paraje desértico remoto cerca de la comunidad indígena del río Gila de Arizona, al sur de Phoenix. El avión quedó destrozado pero nadie sufrió lesiones.
Desde la Plaza/ TeInteresa/ AMH