Se trata de Sahar y Jawaher Bint Abdalá al Saud, 2 de las 4 hijas del rey Adbalá, que estarían retenidas en un castillo desde 2001.
La periodista Hala Jaber del “Sunday Times” las contactó y escribió su historia por entrevistas a través de Facebook, según ese medio. A pesar de tener acceso a internet, las cuatro princesas solo tenían permitido salir del palacio si están acompañadas de sus hermanos hombres o bajo vigilancia de su padre, y solo para hacer compras.
Esta semana dos de las princesas, Sahar, de 42 años y de pañuelo verde, y Jawaher, de 38, pidieron a través de YouTube ayuda a “las organizaciones de derechos humanos, la ONU y la Cruz Roja” para ser liberadas.
“Tienen que venir a esta casa para ver este crimen y liberarnos de inmediato”, dicen en el video, y critican a la ONU, Cruz Roja “y otras organizaciones de derechos humanos” de quienes dicen parece que “necesitan que se les recuerden sus responsabilidades”, cita el mismo medio.
“El rey y nuestros medio hermanos Mutaib y Abdulaziz nos mantienen cautivas desde hace más de una década y nos están dejando morir de hambre ante la mirada impasible del mundo, implora Sahar.
Desde marzo no tienen acceso a “alimentos frescos ni agua embotellada y se están quedando sin provisiones”. “No esperen a que nos ocurra algo irremediable a alguna de nosotras”, dice Jawaher.
Las mujeres dijeron que no tienen noticias de cómo se encuentran sus otras dos hermanas, Maha, de 41 años, y Hala, de 39, recluidas en otro lugar.
Desde la Plaza/El País/ AMH