El Consejo de Estado francés, la mayor jurisdicción administrativa de Francia, ha suspendido este viernes la prohibición del ‘burkini’ en la ciudad Villeneuve-Loubet, en la Costa Azul.
En un comunicado, el Consejo de Estado ha defendido que la toma de tal normativa «no corresponde al alcalde», que debe preocuparse por «mantener el orden respetando las libertades que garantiza la ley», y asegura que no ve ningún riesgo en el orden público por «la vestimenta adoptada por los bañistas».
El Consejo de Estado considera, dando la razón a las ONGs denunciantes, que la prohibición supone un «atentado grave y evidente contra libertades fundamentales como son el derecho de confesión, la libertad de movimiento y la libertad individual».
Gobierno francés no se pone de acuerdo
Para el primer ministro Manuel Valls las normativas prohibicionistas son un combate por la dignidad de la mujer. «Un fular es un fular, un burkini es un burkini y un burka es un burka. Para mí se trata de un símbolo de avasallamiento de la mujer, como si ésta fuera impúdica en un espacio público», declaró este jueves al canal BFMTV.
La ministra de la Familia, la Infancia, y los Derechos de la Mujer, Laurence Rossignol, consideró en días pasados que el burkini se puede ver como “una versión playera del ‘burqa”.
“Se trata de encerrar, de disimular el cuerpo de las mujeres para controlarlas mejor”, dijo en una entrevista al diario Le Parisien.
El pasado miércoles el ministro del Interior francés, Bernard Cazeneuve, pedía «proporcionalidad» en la aplicación de la norma para evitar la «estigmatización» y «enfrentamiento» entre franceses.
Por otra parte, la ministra de la Educación, Najat Vallaud-Belkacem declaraba que una «proliferación de los decretos antiburkini no son bienvenidos» ya que «abre la cuestión sobre las libertades individuales» y «libera el racismo».
Asimismo, la ministra de Salud, Marison Touraine, firmaba en un comunicado que «callarse es dejar creer que no hay otro camino posible que el de las prohibiciones que se han tomado».
Decreto de prohibición
En abril de 2011 Francia se convirtió en el primer país europeo en prohibir el uso del burqa, un vestido que cubre de pies a cabeza e incluye una malla sobre los ojos, y el niqab, un velo que cubre completamente la cara excepto en los ojos.
Las mujeres que rompen esta regla enfrentan multas de 150 euros (205 dólares) o la obligación de cumplir con un servicio público.
El pasado sábado 13 de agosto en el municipio de Cannes se emitió un decreto con la prohibición del burkini en las playas de la localidad.
Ese mismo día, una mujer de 29 años fue multada en la playa de la Croisette con los 38 euros que prevé la normativa; al día siguiente recibió la sanción otra de 32 en la de Zamenhoff, y el lunes por la tarde fue sancionada una tunecina de 57 años, así lo informó el diario local Nice Matin.
Además, otras seis mujeres que se bañaban demasiado cubiertas, según el diario, fueron advertidas, pero optaron por abandonar la playa o cambiarse el traje de baño tal y como declaró el jefe de la policía municipal, Yves Daros.
Al decreto de Cannes se suman los de otras localidades como Sisco, en Córcega.
Las alcaldías locales alegan motivos de seguridad e higiene al considerar que una prenda que manifiesta de forma ostentosa una pertenencia religiosa, cuando Francia y los lugares de culto son actualmente objetivo de ataques terroristas, puede provocar disturbios del orden público.
Expertos en contra de prohibición del burkini
Para la profesora de la universidad de la City en Londres y especialista en religión y política, Sara Silvestre, en entrevista a CNN, manifestó que la prohibición de la prenda beneficia a los intereses de los extremistas.
“Al-Qaeda y el autodenominado Estado Islámico crecen cada vez que las naciones occidentales les dan munición para argumentar que Occidente discrimina o estigmatiza a los musulmanes”, afirmó.
“Lo que provocan estas leyes es que los musulmanes se sientan marginados y, en retorno, el no sentirse bienvenidos impacta en su habilidad y deseo de integrarse en la sociedad, lo que puede generar un alejamiento y enganchamiento con grupos radicales”, añadió.
Tras los ataques a Charlie Hebdo y Niza, Nekkaz dijo que algunos políticos se aprovecharon del miedo al Islam, que se esparce entre la población, para reducir las libertades en Francia y lo consideró como un “movimiento inaceptable, inadmisible e intolerable”.
“Esta prenda le ha dado más libertad a las mujeres»
La australiana diseñadora y comercializadora del ‘burkini’, Aheda Zanetti, indicó que es entristecedor que todo lo que está sucediendo en este momento en Francia.
“Esta prenda le ha dado más libertad a las mujeres ¿y ahora quieren quitársela? ¿Entonces quién es mejor, los talibanes o los políticos franceses? Son igual de dañinos unos que otros”, declaró al diario.es en su portal web.
Para Zanetti el burkini es «muy positiva, simboliza tiempo libre, felicidad, diversión, deporte y salud, ¿y ahora le piden a las mujeres que se vayan de la playa y se queden encerradas en la cocina?”, finalizó.
Tipos de velos
Hijab: Es el velo o pañuelo islámico que cubre completamente la cabeza y el cuello de las mujeres. Es considerado como símbolo de femineidad y religión por muchas mujeres.
El Burka: Uno de los más restrictivos, consiste en un velo largo que cubre completamente la cabeza y el cuerpo, cuenta con una suerte de rejilla para tener cierta visión. Es la vestimenta tradicional de las tribus pashtún en Afganistán.
Niqab: Es un velo que cubre el rostro pero deja al descubierto los ojos. La raíz etimológica nace del termino árabe naqaba, que quiere decir agujerear, porque sólo tiene dos agujeros para los ojos.
Al- amira: Es un velo de dos piezas, una de ellas se ajusta en la cabeza en forma de gorra, usualmente hecha de algodón y poliéster y un velo ajustado en forma tubular.
Shayla: Largo y rectangular muy usado en los países del Golfo Pérsico. Se envuelve la cabeza y se pliega o fija en los hombros.
Chador: Una tela semicircular, que se envuelve desde la cabeza, cubre todo el cuerpo y se sostiene sin ganchos, solo con los pliegues desde el cuello, deja que se vea el óvalo de la cara. En general es de color negro si se presentan en público y colorido si se utiliza dentro de la casa o para ir a la mezquita, puede combinarse con un pañuelo en la cabeza.
DesdeLaPlaza.com/Agencias/Rubén Scorche