La Organización de Naciones Unidas acusó a Irán de tener en el «corredor de la muerte» a 160 jóvenes condenados a la pena de muerte por actos cometidos cuando eran menores de edad.
La ONU informó que el país, bajo el mandato de Hasan Rohani, ha llevado a cabo ejecuciones después de juicios en los que se violaron principios mínimos de justicia.
Las acusaciones se añaden a un pedido de la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Navi Pillay, quien exigió a las autoridades iraníes suspender la ejecución de una joven de 21 años llamada Razieh Ebrahimi.
Ebrahimi tenía 17 años cuando mató a su esposo, con el que se casó obligada a los 14 años. La abogada de la mujer asegura que ella era víctima de violencia doméstica.
Según la agencia Mehr, el defensor de Ebrehimi solicitó extender la ejecución para esperar que la justicia decida si la joven «había alcanzado la madurez» para asumir las consecuencias de sus actos.
La ONU concluye que este año han sido ejecutadas cerca de 250 personas en Irán, a pesar de que diversas organizaciones de derechos humanos aseguran que la cifra es mucho más alta.
En el año 2013, en ese país fueron llevadas a cabo 500 penas de muerte de las cuales 57 se hicieron publicamente.
Desde La Plaza/ Infobae/ KH