Cerca de 800 militantes talibanes atacaron diversos puestos de control militar en la provincia de Helmand, en el sur de Afganistán.
Según las autoridades locales, unas 2.000 familias, la mayoría del distrito de Nawzad, fueron desplazadas por los enfrentamientos.
Muchas de estas familias, tuvieron que caminar largas distancias para huir del conflicto.
Algunos de los afectados se refugiaron en casas de familiares y amigos en distritos cercanos, pero otros tuvieron que dormir a la intemperie.
Las autoridades locales aseguran que están tratando de contactar con las familias afectadas y de obtener ayuda del gobierno de Kabul.
Desde la Plaza/ BBC/ AMH