El Consejo de Derechos Humanos de la ONU se posicionó hoy del lado palestino tras un extenso debate sobre la ofensiva militar israelí contra Gaza y su grave impacto en la población, condenando con firmeza a Israel por sus acciones y exigiéndole que las detenga de inmediato.
La condena forma parte de una resolución a la que el único país que se opuso fue Estados Unidos, que votó en contra por considerar que no tenía espíritu constructivo y que, por tanto, en nada ayuda al cese de las hostilidades.
De los 47 países miembros del Consejo, la resolución fue aprobada por 29 votos, mientras que hubo 17 abstenciones.Latinoamérica apoyó en conjunto el documento, frente al cual los países europeos prefirieron abstenerse por considerar que no era equilibrado al omitir cualquier mención al lanzamiento de cohetes desde Gaza contra Israel.
La sesión de emergencia a la que fueron convocados los miembros del Consejo empezó con el relato y cifras aplastantes de las consecuencias sobre los civiles de los bombardeos israelíes, recopiladas por la oficina de la alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos.
En diecisiete días, Gaza ha sufrido 2.100 bombardeos, 140.000 personas han debido abandonar sus hogares como consecuencia, siete niños fueron blanco primero de un bombardeo aéreo y luego de otro naval mientras jugaban en la playa, y dos mujeres en silla de rueda murieron igualmente en el ataque a un centro para discapacitados, según datos avalados por la ONU.
«Todos estos muertos y civiles mutilados deben pesar mucho en nuestras conciencias (…) Todos nuestros esfuerzos para protegerlos han sido fracasos abyectos», dijo la alta comisionada para los Derechos Humanos, Navi Pillay, a los países miembros del Consejo.
Desde la Plaza/teleSur-La Vanguardia/AMH