Los primeros sábados de mes, el Parque Los Caobos ha sido sede de siete ferias conuqueras, hasta entonces. El encuentro ha permitido el expendio de alimentos libres de procesos químicos, el rescate e intercambio de semillas y plantas medicinales, alternativas para la prevención y sanación de afecciones, pero sobre todo la articulación de colectivos que trabajan la tierra y la vuelta a la raíz, en la ciudad.
Entre las diversas organizaciones, e individualidades se La Campaña Venezuela Libra de Transgénicos, el Organopónico Bolívar 1, los colectivos Autana Tepuy, Colectivo Agropolítico Abya Yala, Montaráz, Ecologarte, La Minka, Diversidad, Territorio Caribe, Ateneo Popular, Senderos, Lombriz Roja Urbana, Hierbas ancestrales, Tierra hogar, la red de productores de La Vega, La Pastora y La Limonera (Baruta), Sabiduría lunar, Lactarte, y Centro madre, entre otros. Asimismo, participa la Escuela Venezolana de Alimentación y Nutrición (EVAN).
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“Estamos en la construcción de un modelo autogestionado, con apoyos puntuales de instituciones del Estado, pero que apunta al empoderamiento popular”, explica Alfredo Miranda, voz de la Campaña Venezuela Libre de Transgénicos y del Organopónico Bolívar 1, ubicado en Bellas Artes.
Después de que el presidente Nicolás Maduro llamara a la siembra, las diversas organizaciones que se reúnen alrededor de esta actividad encuentran en sus iniciativas el interés del común para la distribución de sus alimentos y productos, derivados del esfuerzo por lograr el ecosocialismo.
En plena guerra económica se ha hecho evidente la necesidad de volver a la producción nacional, a eso que Hugo Chávez llamó economía comunal, un trato directo entre productores y consumidores, en el que la plusvalía no queda en manos del intermediario, dueños de abastos, supermercados, o transformadores de la materia prima. Lo que permite realmente el precio justo, “porque el objetivo de esta nueva forma de producción no es hacer dinero, sino alimentar saludablemente al pueblo”.
Roraima Ramos, miembro del colectivo Diversidad y productora de Esquina El Conuco, pequeño vivero de plantas ornamentales y alimenticias, ubicado en Maripérez, define a la Feria como una “respuesta al bloqueo y situaciones de dependencia que experimentamos en la ciudad”.
Además explica cuáles son las premisas en las que se sustenta esta iniciativa:
1- Promover y distribuir productos agroecológicos y orgánicos, libre(s) de transgénicos y agrotóxicos, que fomentan y construyen la soberanía alimentaria.
2- Llevar los productos directamente del productor al consumidor, para simplificar las cadenas de distribución, es decir, sin intermediarios, y en este sentido reducir los costos.
3- Transformar la figura de consumidor a prosumidores, y así, ser participantes en la producción de sus alimentos.
Para Miranda, “no se trata de traer el conuco a la ciudad, sino que sean los conucos de la propia ciudad los que produzcan sus alimentos. Y activar así la agricultura urbana para lograr la soberanía alimentaria y derrotar la guerra económica”.
“La idea es multiplicar la experiencia”, concluye Ramos. La próxima Feria conuquera será el sábado 6 de junio ¡Llégate, apoya y se parte de la verdadera revolución!
DesdeLaPlaza / Indira Carpio Olivo