Continúa la incertidumbre en la frontera colombo-venezolana tras su cierra, que lleva hasta el momento mil 12 personas deportadas a Colombia. El gobernador de Táchira, José Vielma Mora, informó que los deportados se les han garantizado sus derechos.
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El día de ayer se habilitaron unidades móviles para transportar a estas personas de manera voluntaria de vuelta a su país de origen. Así mismo se permitió el paso flexible y humanitario, dándole prioridad a las embarazadas, 45 pacientes renales, insulinodependientes y quienes necesitaban quimioterapia.
Sin embargo, autoridades manifestaron que se han reportado denuncias de 36 infantes que se encontraban sin ninguna compañía adulta en la frontera venezolana, a raíz que sus padres se habían quedado en Colombia. “Colocamos al frente del caso al defensor del pueblo del Táchira y se verificó que lo de los 36 niños desolados era falso. Otra mentira más”.
Precisaron que ninguna pareja había manifestado extravío de alguno de sus hijos en el sitio e indicó que los funcionarios velaran por la protección del núcleo familiar. “Estamos sacando las familias de un sector dominado por paramilitares colombianos”.
Por otro lado, más 200 ciudadanos han sido deportados del barrio La Invasión de San Antonio del Táchira, en donde las casas ya han sido revisadas y marcadas con una “R” por la OLP.
“Quienes están siendo enviados a Colombia no tienen dinero y algunos se fueron a albergues que ya están llenos”, declaró a Últimas Noticias una de las personas deportadas.
El gobernador denunció que en el municipio Bolívar, el exgobernador de la entidad, César Pérez Viva, les prometió a las personas que habitaran el lugar de manera ilegal a cambio de votos.
DesdeLaPlaza.com/Agencia/GV