La criminalidad detectada en los urbanismos de la GMVV responde a los años de exclusión y “miseria y condiciones de vida infrahumana” a la que fue sometida sectores y que en consecuencia el Estado amerita ejercer un esfuerzo enorme para el desarme de las bandas delictivas.
A propósito de la Operación Liberación del Pueblo (OLP) que el Gobierno ha llevado a cabo en las últimas semanas, con focos de criminalidad y “paramilitarismo” en los urbanismos de la Gran Misión Vivienda Venezuela, el vicepresidente de Socialismo Territorial, consideró que una de las fallas cometidas fue asumir que con el cambio material o asignación de casas a los sectores populares se sustituiría “toda una historia vivida y aprendida” producto de una “exclusión” por muchos años, expresó en entrevista del canal del Estado.
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En este sentido, subrayó que el poder popular se enfrenta una limitación que son los “actores armados” capaces de ejercer violencia en dichos sectores y en consecuencia le corresponde al Estado desarmar a las bandas que impiden “la insurgencia del poder popular”.
De acuerdo a su apreciación se requiere de un trabajo ideológico, político y social que no se realizó desde un principio para el convivir de todas las familias. Sin embargo, resaltó que se trata de 3 o 4 familias vinculadas con el crimen en urbanismos compuestos por mil familias.
Además de esta acción Jaua mencionó que las descarga de misiones sociales, políticas y de inclusión enmarcan parte de las soluciones por parte del Gobierno..
DesdeLaPlaza.com/NAD/AMH