El Fondo Monetario Internacional (FMI) inició el proceso de selección de su nuevo dirigente, ya que el mandato de Christine Lagarde termina el 5 de julio.
Aunque Lagarde se ha mostrado abierta a repetir mandato como directora gerente, el caso Tapie complica sus opciones: será juzgada por negligencia en su etapa de ministra de Finanzas de Francia en un caso de corrupción de 2007, con el Gobierno de Nicolas Sarkozy.
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Los candidatos pueden ser presentados por un gobernador o director ejecutivo del Fondo durante un periodo de nominación que comienza este 21 de enero y finalizará el 11 de febrero. Una vez concluido este periodo, el secretario del Fondo confirmará con los nominados su deseo de asumir el cargo e informará al consejo ejecutivo del nombre de los candidatos. Si el número final excede de tres, se mantendrá en secreto su identidad hasta que se pongan de acuerdo en una terna (en un plazo de siete días). A partir de ahí, esperan haber decidido al nuevo director gerente el 3 de marzo.
“Como hicimos en 2011, intentamos alcanzar la decisión por consenso”, señaló el decano del consejo ejecutivo de la institución Aleksei Mozhin, en un comunicado.
“El consejo ejecutivo ha adoptado un proceso abierto, transparente y basado en el mérito, similar al utilizado en el previo”, recalcó Mozhin.
El comunicado del fondo destaca que la selección de los finalistas y del candidato final debe basarse en su perfil “sin preferencias geográficas”, pero no es un secreto en Washington que la procedencia del director gerente importa después de que los tres últimos hayan sido europeos.
En las reuniones del FMI en octubre de 2015, Lagarde se mostró dispuesta a repetir si el consejo ejecutivo se lo pedía, pero en diciembre de ese mismo año, un tribunal ordenó juzgarla en Francia por el caso Tapie y eso pone piedras en el camino.
En las condiciones que el FMI destacó en su comunicado que el o la futura directora gerente tendrá que tener una trayectoria reseñable en política económica, habilidades diplomáticas, capacidad de comunicación y de proporcionar una visión estratégica para el trabajo de los gestores.
Deberá mostrar un alto compromiso con los objetivos de la institución construyendo un consenso en asuntos clave y con capacidad para la cooperación multilateral.
DesdeLaPlaza.com/ElMundo/LDJ