Para visualizar y digerir lo que supuso el impacto de una bomba de uranio de 16 kilotones sobre una población que por aquel entonces era de unas 250.000 personas, el periodista de datos Kuang Keng del medio PRI elaboró un mapa con el cual se puede llevar semejante masacre a nuestros barrios y ciudades.
El funcionamiento es sencillo: le damos a start, buscamos nuestra ciudad y seleccionamos el punto exacto donde deseamos lanzar la bomba. Tras eso sólo resta apretar el botón rojo para ver los efectos.
De esta forma puede comprobarse que en un rango de 800 metros el 90% de la gente moriría, y las mujeres embarazadas que sobrevivieran sufrirían abortos por la radiación. A un kilómetro y medio fallecería el 70% de las personas y la destrucción de infraestructuras seguiría siendo total.
A más de 3 kilómetros todavía habría edificios destruidos, y las ventanas de las casas se romperían a distancias de hasta 20 kilómetros.
Así podemos observar que si Little Boy impactara sobre la Puerta del Sol de Madrid, las bajas instantáneas llegarían hasta el Parque del Retiro, y los cristales rotos fruto de la explosión hasta las Rozas. En poblaciones más pequeñas los efectos son todavía más impresionantes.
Eso sí, el mapa sólo tiene en cuenta la detonación, pero ignora los efectos secundarios de la radiación, que también causarían bajas humanas y heridos a medio y largo plazo.
DesdeLaPlaza.com/Teknautas/MB