Aunque a diferencia de Venezuela, los medios condenan esta práctica aberrante, como se puede leer en el editorial del diario «El País», donde se da cuenta de la Operación Convector, iniciada por orden de un juzgado de Teruel, y que permitió descubrir una compleja y extensa trama de exportación ilegal de medicamentos en la que han participado varios distribuidores y más de 200 farmacias.
Los fármacos objeto de transacción ilegal, valorados en más de 50 millones de euros, eran por lo general compuestos de elevada demanda, sin alternativa terapéutica y alto precio. Dice el diario español en su editorial, que «todos los fraudes son reprobables, pero este resulta especialmente abyecto: el afán por conseguir beneficios ilegítimos llegó a causar el desabastecimiento de medicamentos vitales, como tratamientos contra el cáncer, inmunosupresores para evitar el rechazo en personas trasplantadas o antiepilépticos».
De acuerdo al diario,estos delincuentes aprovechaban que en España los medicamentos tienen un precio regulado generalmente inferior al de otros países europeos y los revendían bajo la etiqueta de productos de parafarmacia o falsas devoluciones a distribuidoras, que los canalizaban hacia países como Alemania, Dinamarca, Holanda y Reino Unido, donde los vendían a precios que en algunos casos llegaron al 800% del costo en España.
Concluye la publicación informando que a día de hoy, ya tienen 38 imputados, a los que se acusa de delitos contra la salud pública, Hacienda y la Seguridad Social, falsedad documental, blanqueo de capitales y pertenencia a grupo criminal.
Desde la Plaza/El País/AMH