Dos policías resultaron heridos por balas el jueves en la ciudad estadounidense de Ferguson (Misuri), donde la muerte de un joven negro en agosto pasado había desatado una ola de protestas, confirmaron las autoridades.
Los dos policías están vivos y conscientes, indicó el jefe de la policía del condado de San Luis, Jon Belmar.
Uno de los policías recibió un disparo en la cara y el otro en la espalda cuando la policía intentaba dispersar una manifestación frente a la comisaría, agregó.
Un testigo, Markus Roehrer, declaró al canal de televisión CNN que había escuchado disparos y en un primer momento pensó que podrían ser petardos. “Cuando vi a los policías caer, me dije que era algo mucho peor”, dijo Roehrer a la CNN.
Belmar dijo que no estaba muy claro de donde vinieron los disparos, pero según Roehrer el ruido de las detonaciones provino de detrás de un pequeño grupo de unos 40 manifestantes.
Sin embargo, atribuir “esto a los manifestantes sería totalmente injusto”, dijo Roehrer a la CNN. Los incidentes se produjeron después de la renuncia el miércoles del jefe de la policía de Fergurson, Thomas Jackson.
Jacson renunció tras la publicación de un severo informe del departamento de Justicia que denunciaba la discriminación racial en la policía de Fergurson.