Miles de personas acompañaron a su santidad el Papa Francisco donde hicieron extensas filas para participar en el evento religioso, además se ampliaron las medidas de seguridad y se prohibieron palos para selfies y pancartas, la peregrinación comenzó a las 17, hora local (21:00 GMT), a la altura de Central Park West Drive y la calle 72, en el lado oeste de la ciudad de Nueva York, y terminó en la calle 60.
Se estima que unas 80.000 personas asistieron a la peregrinación y accedieron quienes ganaron una entrada en el sorteo que se efectuó semanas antes de la llegada del papaFrancisco.
La zona que recorrió el Pontífice en el papamóvil fue vallada días antes donde la policía estableció diferentes puntos de acceso.
Las personas congregadas esperaron con paciencia a pasar los controles de seguridad y a partir de las 15:30, hora local (19:30 GMT), se cerraron todos los accesos al parque.
Quienes lograron acceder a la zona del recorrido sólo pudieron hacerlo con agua, algún refrigerio y cámaras de fotos personales, sin embargo estuvieron prohibidos los palos para selfies, pancartas y bolsas grandes.
La seguridad y los dispositivos que se desplegó en la zona no tienen precedentes en la ciudad, con agentes de los servicios secretos, la policía de Nueva York, el FBI y unidades especializadas en la lucha antiterrorista.
«Los neoyorquinos están dando una calurosa bienvenida al Papa y con los brazos abiertos. (…) El entusiasmo que despierta está siendo extraordinario», destacó el alcalde de la ciudad, Bill de Blasio, sobre la visita del Pontífice.
Luego el papa Francisco se trasladó al Madison Square Garden, donde ofreció una misa ante unos 20.000 fieles, en el último acto de su visita a la Gran Manzana para luego seguir su viaje el sábado hacia Filadelfia.
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